Aprende a tratar un cabello graso

Un pelo graso se caracteriza por ensuciarse mucho antes de lo normal, porque sus raíces se apelmazan debido al peso de la propia grasa o porque brilla en exceso. Con algunos consejos de profesionales conseguirás que tu pelo graso no vuelva a convertirse en una pesadilla. Aprende a tratar un cabello graso

Primeros pasos para librarse de un pelo graso

Aunque el sebo capilar siempre es necesario para poder mantener el cuero cabelludo perfectamente hidratado y poder revestir al cabello con una capa de lubricación, de brillo y de protección, el exceso de éste puede llegar a ahogar las raíces y favorecer la aparición de la antiestética caspa e incluso de la caída del pelo.

La utilización de un champú que esté elaborado a base de ortiga, de romero, de algas o de té verde por ejemplo, ayudan a combatir con bastante rapidez los problemas de grasa en el cabello. Si por otra parte cuentas con unas raíces grasas pero las puntas y los medios están secos, deberás elegir una que tenga acción reequilibrante.

Cada vez son más las mujeres que cuentan con puntas abiertas mientras que sus raíces están grasas debido entre otras causas, al uso de mascarillas y de acondicionadores. Para evitarlo se deben aplicar estos productos comenzando en las puntas e ir subiendo poco a poco hasta arriba sin llegar a tocar la raíz, pero siempre trabajando perfectamente los mechones de todo el cabello. Solamente las mascarillas de arcilla son ideales para aplicarlas por todo el pelo y resultan perfectas para luchar contra el cabello graso.

Un cabello graso por otra parte, debe lavarse a diario si resulta necesario. Si cualquier día se nota más graso de lo normal, es necesario hacer dos enjabonadas. La primera puede hacerse con un champú para uso frecuente y la segunda con el utilizado normalmente para tratar este problema.

Limpieza y frescor de larga duración

Para conseguir que tu cabello te aguante más limpio y fresco durante más tiempo, sigue estos consejos:

  1. Si el aire del secador o el agua de la ducha están demasiado calientes, conseguirás que las glándulas sebáceas se reactiven y por tanto aumentará la presencia de la grasa en tu cuero cabelludo, por lo que deberás lavarlo con agua tibia y usar el secador, si es necesario, a una temperatura media. Ten en cuenta también que las glándulas sebáceas se activan sobre todo por la noche, de ahí que sea preferible lavarse el pelo por las mañanas.
  2. Ten especial cuidado durante el aclarado y elimina completamente los restos del champú y del acondicionador, ya que los residuos de estos productos junto con la cal que contiene el agua, conseguirán apelmazar el cabello.
  3. Acostúmbrate a desenredar el pelo con la cabeza colocada hacia abajo sin llegar a tocar la raíz. Los cepillos de cerda de jabalí y los peines de madera con púas separadas, son los que logran arrastrar menos cantidad de grasa a lo largo de todo tu cabello. No dudes en usarlos si tienes este problema y verás como los resultados no se hacen esperar demasiado.