De ruta por Transilvania

ccEl autor de Drácula, Bram Stoker, jamás estuvo en Transilvania, pero eligió esta región como escenario principal de su novela, porque pensaba que todas las supersticiones que había en el mundo, se encontraban reunidas en la herradura formada por Los Cárpatos. Y para nombrar a su más famoso personaje, Bram Soler, se inspiró en el apodo de un príncipe de Transilvania: “dracul”, cuyo significado en rumano es diablo. Y también se fijó en la figura de su hio, llamado Vlad y con el sobrenombre de “El Empalador”, por el método que utilizaba para sembrar el pánico en el campo de batalla.

Bucarest

La ruta conocida como la de Drácula, va desde Bucarest hasta Transilvania persiguiendo las huellas de Vlad el Empalador. Comienza en el palacio situado en el barrio antiguo de Curtea Veche en Bucarest, que fue primera corte real, y va buscando su tumba en el monasterio de Snagov, que se encuentra levantado en una pequeña isla con el mismo nombre; las ruinas del castillo de los boyardos ubicadas en Poienari y los restos de torres de vigilancia en Targoviste.

Los pueblos medievales

El recorrido de esta ruta pasa a continuación por pueblos espléndidos medievales de Sighisoara y de Sibiu, siendo el primero el lugar donde nación Vald Tepes. Más tarde se detiene en dos lugares muy vinculados con la novela: Bistrita, que es el pueblo en el que duerme Jonathan Harper durante la primera noche y el desfiladero del Borgo, donde se sitúa la fortaleza del vampiro en el libro.

El castillo de Drácula

Es en dicho desfiladero donde se encuentra el hotel Castillo de Drácula. Este edificio fue construido en los años 70, quedándose el presupuesto corto por lo que solo se alcanzó la condición de castillo en una de sus torres. En el sótano se encuentra la cripta, decorada con escenas que hacen alusión a coches fúnebres y vampiros y que representa el dormitorio de Drácula. Es posible apuntarse a una visita para conocerla, visita que suele terminar con la aparición del espíritu maligno, un personaje envuelto en una capa negra e iluminado por una vela.

Brasov

De vuelta a Bucarest hay que detenerse en Brasov, un gran destino turístico dentro de rumanía. En el centro de dicha ciudad que se encuentra rodeada por montañas y junto a la estación de esquí conocida como Poiana Brasov, se encuentra la iglesia Negra, la catedral gótica más grande que se puede encontrar en Estambul y Viena.

Castillo de Bran

En la última etapa de la ruta, se encuentra el castillo de Bran, construido en el año 1382 para defender la zona de los turcos. Siglos después fue la residencia real de los reyes de Rumania. Hoy en día es un museo que se encuentra abierto al público y contiene pinturas, muebles y recuerdos de la época de residencia real. Su perfil contiene almenas, torres puntiagudas y saeteras, algo que alimenta la idea de que puede tratarse del castillo descrito en la novela.