Dietas famosas sometidas a examen

Descubre dos dietas clásicas que nunca llegan a caer en el olvido y que van resucitando de una manera periódica cada cierto tiempo. Aquí te intentaremos desvelar todos sus secretos sobre ellas y si realmente funcionan. Dietas famosas sometidas a examen El método Montignac 
Con este método se trata de evitar mezclar en una misma comida carbohidratos y grasas, basándose en el índice glucémico de cada uno de los alimentos que se consumen, es decir la velocidad a la que logra llegar un carbohidrato hasta la sangre en forma de glucosa. 
Esta dieta clasifica cada uno de los alimentos en malos, los que suben mucho la glucosa y en buenos, los que no elevan su nivel, así como en las grasas que consiguen elevar el colesterol y las que no lo descienden. Como se restringen los hidratos ésta es una dieta cetogénica que logra adelgazar al lograr que el cuerpo tenga que conseguir la energía de las reservas de grasas. 
Puede resultar eficaz sobre todo al principio si la hace una persona que no la haya realizado nunca antes. Las ventajas de esta dieta es que logra reducir el apetito ya que se incluyen en ella alimentos que son saciantes al ser ricos en fibras. Igualmente es muy cómoda ya que no es necesario pesar cada uno de los alimentos ya que aunque prohíbe algunos,  no limita la cantidad de otros. La comida tampoco resulta monótona y cuenta con cierta libertad para preparar diferentes menús.
Los inconvenientes es que dada la escasez de hidratos de carbono, se reduce la resistencia de los músculos, algo que puede llegar a provocar fatiga. Es rica en grasas algo que resulta nocivo para la salud del corazón y en ella se puede abusar de quesos y de vinos sin que se tengan en cuenta el inconveniente de ello.

Dieta del Dr. Atkins 
En esta dieta las grasas y las proteínas suponen casi el 90% de los alimentos ingeridos sin tener en cuenta si son o no altas en colesterol. Solamente un 10% de los hidratos consumidos se consiguen de las verduras y debe limitarse lo máximo posible el consumo de las legumbres, pastas, arroz y panes. También se deben evitar las verduras y frutas que sean ricas en fibra, limitándose a 50 gramos las verduras verdes por comida.
Funciona consumiendo cantidades grandes de proteínas así como un mínimo de carbohidratos. El peso se reduce gracias al poder saciante que tienen las proteínas frente a los carbohidratos y es que la falta de estos últimos provoca cetosis, es decir un exceso de acetona, que logra reducir el apetito.
A los seis meses los kilos perdidos con esta dieta es más grande que con otras pero al año, el peso que se pierde en total es el mismo que realizando otro tipo de dietas. Uno de los grandes inconvenientes de esta dieta es la ausencia de verduras y de frutas que puede provocar fatiga y desgaste muscular de igual manera que una deficiencia de minerales y de vitaminas, descalcificación, disminución de los niveles de potasio y una acumulación de diferentes desechos del metabolismo.