Gorditos en la espalda

Los rollitos en la espalda son bastante estresantes sobre todo cuando se notan si se usa un traje de baño o si se marcan bajo la ropa por acción del sostén. Entonces nada mejor que manejar adecuadamente la dieta y asesorarse en una buena rutina física para ayudarlos a desaparecer o por lo menos disimular. Pero es importante conocer la causa de estos gorditos para saber cual es el paso a seguir. Gorditos en la espalda La grasa puede acumularse en cualquier parte del cuerpo y muchas veces aunque una chica sea delgada hay ciertas zonas en las cuales se puede generar depósitos de grasa y hacer que se produzcan una que otras llanticas. Una de las zonas más comunes y que más fastidio produce es la espalda, pues es allí donde si se observa por detrás se perciben ciertos abultamientos que incluso se pueden evidenciar por encima del pantalón o que se marcan sobre el sostén y se dejan ver incluso bajo la ropa. 

Hay muchas razones por la cuales se producen y no necesariamente es por mala alimentación, pues muchas veces estos gorditos se pueden deber a un almacenamiento indebido de líquidos y por consiguiente su retención, haciendo que se hinche la espalda y se vea como si una mujer fuese gorda. Las soluciones también puede ser diferentes pero eso depende de la causa del problema. Muchas mujeres piensan que haciendo ejercicio se pueden rebajar y están en lo cierto, pero lo indebido es la manera en que se practican pues en medio de la obsesión por quitarlos rápidamente, se hacen de mala forma y con afán, generando solo un desgaste corporal y daños en los músculos. 

Para conocer el origen de ellos, lo mejor es acudir a un medico que evalúe si esto está dado por la dieta o por retención de líquidos y allí mismo se darán ciertas recomendaciones. Si la causa es la alimentación, lo mejor es rediseñar el plan alimenticio pues según los especialistas el éxito de un proceso de adelgazamiento o reducción de talla en determinada parte del cuerpo, depende en más de la mitad del porcentaje a la dieta de cada persona. Esta se basa en la reducción de harinas y calorías que muchas veces son más altas que lo que se reduce por medio del ejercicio.

El segundo paso es justamente la actividad física, específicamente los aeróbicos para ir minimizando grasa corporal y ejercicios más específicos y guiados por un profesional o profesor los cuales sirven para trabajar ciertas áreas y darle la forma deseada. El ejercicio se convertiría en el resto de porcentaje del proceso y sobre todo para efectos de reducción de celulitis y flacidez generada al bajar de peso. Cada mujer tiene en su cuerpo características diferentes para practicar ejercicios más específicos y es en este punto donde debe haber orientación para evitar hacer daño mientras se practican, pues habrá algunas con problemas de columna que no puedan ejercitarse de cualquier manera. 

Una ayuda rápida para disimularlos mientras se eliminar por medio del ejercicio pueden ser las fajas, pues es sabido que los gorditos no desaparecerán de un día para otro y que debe ser un proceso constante. Los masajes también pueden funcionar ya que además de reducir tallas se relajan los músculos y puede ser una buena terapia desestresante.