Existen masajes que además de ayudarnos a respirar mejor, nos ayudan a atenuar nuestro estrés de una manera natural. Descubre sus beneficios 
¿Qué es la depresión?
Cuando nos sentimos irritables, tristes o insatisfechos, es muy probable que sintamos dolores físicos que sean de origen desconocido y que no cuenten con una explicación médica pero que pueden ser indicadores de algo más serio como por ejemplo el estar sufriendo una depresión. Este tipo de enfermedad tiene que ser tratada de una manera apropiada ya que puede conllevar consecuencias bastantes graves tanto a nivel psicológico como físico.
La depresión en sí misma es un trastorno que se encuentra mucho más extendido de lo que podemos llegar a pensar. Ésta puede aparecer de una manera cíclica o bien puede ser sufrida de una manera más prolongada. En cualquier caso, es imprescindible tratarla cuanto antes.
El origen de esta enfermedad se suele relacionar con una período prolongado de estrés que normalmente tiene que ver con pérdidas que no se han superado de una manera adecuada, como por ejemplo el despido de un trabajo, la separación de la persona amada, crisis de edad, problemas de salud, etc.
Terapia holística
El masaje para tratar la depresión nace de la concepción de que el hombre se considera en toda su integridad, es decir, en cuerpo, en mente y en espíritu, algo que llega a determinar las líneas de la intervención del masaje. Cada uno de los movimientos de este masaje se integra dentro del conjunto de este tratamiento, ya que cada uno de los elementos de nuestro organismo se encuentra relacionado con todo el resto de nuestro cuerpo. Es por eso que este tipo de terapia intenta tratar a cualquier persona desde los mismos pies hasta los pelos de la cabeza.
Dependiendo de las necesidades y de las exigencias de cada persona, este masaje se aplica de una manera completamente personalizada y la mejoría en general se llega a hacer patente desde incluso la primera sesión.
Beneficios
A nivel físico los estímulos que llega recibir el cuerpo actúan mucho más que a un nivel epidérmico ya que llega a hacer efecto también en los estratos más profundos de la piel favoreciendo la circulación de todos los líquidos corporales como por ejemplo la linfa y la sangre, lo que conlleva la eliminación de las toxinas, la reducción de la celulitis, la hinchazón de los pies, piernas, brazos, manos y tobillos y facilitan los estiramientos de las articulaciones y de los músculos que consiguen ganar elasticidad con la ayuda del masajista.
De igual manera la respiración se vuelve más correcta obteniendo grandes resultados, ya que con la espiración se descargan las emociones negativas como el estrés y las tensiones, mientras que con la inspiración, nuestro organismo se logra llenar de oxígeno al máximo, algo esencial para que circule toda la energía vital. De esta manera, toda nuestra piel y en especial nuestro rostro, consigue recuperar un tono rosado muy saludable.
