Melatonina = Juventud

Todas pasamos, o vamos a pasar, por ese momento en que creemos que esta todo perdido, que los años se nos vienen encima, y que la ley de gravedad esta en contra nuestro.
Si bien es natural y lógico, en la actualidad nos seguimos asombrando con las novedades de las ciencias y la tecnología en la salud.
De buena fuente ha surgido la noticia de que científicos españoles han descubierto el significado, la importancia y las funciones de la MELATONINA.

La melatonina es una hormona que se produce en el cerebro naturalmente en pequeñas cantidades, pero además se encuentra en varios tipos de alimentos como maíz, avena, cerezas, arroz y vino tinto. Te preguntarás ¿Qué hace? ¿Porqué es tan importante?, Momento chiquita! Lo que hace es lograr el retraso de los efectos antioxidantes e inflamatorios del envejecimiento (¡Vamos melatonina todavía!). Hasta aquí todo barbaro, pero el problemita que presenta (minimisémoslo mejor) es que el cuerpo humano deja de producirla alrededor de los 30 años. Lo que quiere decir, es que nos abandona en el mejor momento de nuestras vidas.

Stop!! El Departamento de Fisiología de la Universidad de Granada ha descubierto que «una dosis diaria de melatonina a partir de los 40 años no sólo neutraliza los efectos del envejecimiento, sino también incrementa la longevidad. Se ha realizado una prueba con ratones, genéticamente modificados, que presentaban un envejecimiento celular acelerado, y un deterioro cerebral, daños del sistema inmumnológico y celular (en la sangre) y en la piel. Varios estudios ya han analizado los efectos protectores de la melatonina, pero no se ha encontrado suficiente evidencia de sus beneficios. 

 ¿Lo Mejor? Que ya esta permitido, y se permitirá más, luego de un tiempo, en varios países su comercialización como suplemento nutricional. Luego de ser comprobada su efectividad y seguridad en seres humanos.

¿Próximo paso? Producir cantidades suficientes de la hormona, no solo paras detener el proceso de envejecimiento, sino también para lograr que este retroceda. ¡Iujuuuuuuuuuuuuuu!