La primera cita es un momento que pone nerviosa a cualquier mujer y lo primero que piensa es que ropa se pondrá. Pero a veces, en medio de su nerviosismo, se pueden confundir y usar lo que peor les queda. 
La primera cita es un momento de mucha emoción para una mujer y es que debe sentirse muy tranquila física y mentalmente. Algo que las preocupa es la ropa, pues además de sentirse tranquilas, tienen que verse muy bonitas e impactar a esos chicos que esperan por ellas. Para muchos chicos, la primera impresión es lo que cuenta y así estén nerviosos, estarán pendientes de todo lo que esa chica que les gusta, tenga puesto, diga o piense.
– Hay que evitar el uso de tacones extremadamente altos, porque no muchas saben manejarlos y puede que durante toda la noche, lo único que genere nervios y hasta malestar, es el dolor de pies. Entonces en vez de suplicar que el tiempo no pase muy lento para compartir más, se rogará es porque el reloj corra y este de vuelta en casa para poder quitarse los zapatos.
– Las joyas no son apropiadas y menos cuando son tan refinadas, grandes o muy llamativas. Algo que tienen mucho en cuenta los hombres, es que esa mujer que los trae locos, no se adorne como un árbol de navidad, que no llame tanto la atención y que ante todo, exhiba mucha sencillez y personalidad.
– Los sombreros y gorras no son muy adecuados para esa primera vez. Como se mencionaba antes, hay que buscar la sencillez, presentarse de una manera simple pero llamativa y no precisamente por los accesorios que lleve puestos. A veces, el hecho de usar tantas cosas para tratar de verse bonitas, puede reflejar un poco de inseguridad y miedo.
– Los escotes muy llamativos y profundos no son una buena idea, porque lo que se generará en el hombre serán dos cosas: lo primero es que puede pensar todo tipo de cosas pero pocas serán positivas, y la segunda, es que prestará mas atención a la zona del busto de la mujer que tiene en frente, que a lo que dice o a la forma de ser.
– Las medias de malla tampoco son muy agradables en una primera cita y mucho menos si se combinan con las minifaldas. Puede generar una imagen de mujer fácil, que no le importa lo que piensen los demás o la imagen que dejen, sino que su actitud es bastante atrevida y sin ser poco o nada recatada.
– Por último, esta le uso de perfumes penetrantes o en grandes cantidades. Una cosa es oler rico y verse bien, pero otra es tener esa sensación de que acaba de aplicarse perfume y que a veces, el olor no sea tan agradable. Probablemente lo que se cree, sea una repulsión.
