La receta que sigue es un postre exquisito, un esponjoso mousse de cava muy fácil de elaborar. Sólo tendrás que ir con cuidado cuando añadas la mezcla a la nata montada de que ésta no baje, ya que perdería esta esponjosidad en gran parte. 
Ingredientes para 6 personas: ¼ de litro de cava, 3 yemas de huevos, 4 hojas de gelatina, 400 grs. de nata para montar, un poco de zumo de un limón y 75 grs. de azúcar.
Bate la nata hasta que quede semi-montada y guárdala en el frigorífico.
Deja las hojas de gelatina sumergidas en agua fría, para que se hidraten.
Echa en un cazo el cava, el azúcar, las yemas y un chorrito de zumo de limón. Pon a cocer con el fuego muy suave, removiendo frecuentemente, y, cuando veas que empieza a hacerse espeso, lo que suele ocurrir al cabo de unos 10 minutos, aparta el cazo del fuego y añade las hojas de gelatina. Hazlo despacio, de una en una y no introduciendo la siguiente hasta que la anterior no esté completamente integrada en la mezcla.
Deja pasar un rato para que se enfríe. Cuando esto ocurra, añade la mezcla a la nata que ya habías batido. Debes hacerlo también muy despacio y con movimientos suaves.
Reparte la mezcla en las copas y guarda éstas en el frigorífico, donde deberán permanecer por lo menos durante un par de horas.
Puedes adornarlo como te parezca, como por ejemplo con chocolate deshecho por encima o con las claras de las yemas que has usado a punto de nieve.
