Si quieres hacer que tu pareja perdure en el tiempo, hay varias cosas que puedes implementar a tu relación cotidiana para evitar caer en los errores comunes que terminan disolviendo y desgastando a las parejas. 
Imagina una poción que garantice el amor duradero, y que, si la tomas, tu relación nunca irá barranca abajo y jamás de los jamases caerás en las dudas existenciales sobre tu pareja. Es más, tú y tu Romeo envejecerán juntos y felices… ¿Ya lo imaginaste? Bueno, ahora debemos decirte, este brebaje no existe, pero sí es cierto que hay muchas cosas que puedes hacer para ayudar a perdurar al amor. Para estar juntos en los momentos difíciles:
- Sé honesta pero no seas cruel con las verdades domésticas. Dile honestamente lo que piensas de él, siempre que eso no implique ser innecesariamente dañina.
- Junto a tu chico, hagan una lista de las cinco cosas agradables que solían hacer el uno por el otro y luego, gradualmente, vuelvan a introducirlas en la relación.
- Anota todo aquello que te atrajo de él cuando lo conociste. Y cuando las cosas se pongan feas, lee esa lista para ganar perspectiva.
- No dejes un aniversario sin festejar. Haz una tregua con los problemas (si es que los hay), y brinda por el pasado, el presente y el futuro compartidos.
- Establezcan una regla: jamás discutir o desacreditar al otro en público.
Cómo desarmar una pelea:
- Cualquiera puede sobrellevar una pequeña discusión (“preferiría que no dejes la ropa tirada por toda la casa”), pero si ignoras esos detalles, podrían terminar en una pelea con argumentos mayores (“eres un egoísta y haragán”). No pases por alto esas cuestiones para que no se transformen en “grandes temas”.
- Respeten otra regla: jamás irse a dormir peleados. Es mejor arreglar las cosas antes de cerrar los ojos.
- Durante una discusión, dí alguna frase que sirva para reconectarte con tu chico y frenar las cosas de modo que no se vayan de cause, por ejemplo: “¿Sabes cuanto te amo?”.
- Establezcan normas incluso para pelearse acaloradamente. Permítele a tu pareja hablar de modo ininterrumpido durante diez minutos sin decir nada parecido al clásico “sí, pero tu…”. Luego, será tu turno.
- Pónganse de acuerdo en una señal que puedan dar cuando sientan que una discusión está subiendo de tono. Por ejemplo, levanten las manos. Cuando lo usen, funcionará como un gatillo para suavizar la tensión del ambiente.
- Si todo lo anterior falla, haz algún chiste (en el momento indicado) que ayude a pasar el mal trago. No se queden enojados por mucho tiempo.
- No hablar es un gesto infantil. Si tu hombre enmudece, pregúntale si hay algo que puedas hacer por él. ¿Acostumbras a cerrar la boca? Entonces recuérdate a ti misma que la persona más fuerte es la que afloja primero y establece el contacto.
Hablar, hablar, hablar:
- Antes de prepararte para una pelea, imagina un final feliz.
- Tengan las discusiones fuera de la casa. Salgan a caminar y denle a su relación una perspectiva más fresca.
- Es fácil perder las formalidades en una relación, pero nunca dejes de agradecer ni de pedir las cosas “por favor”.
- Ten cuidado al decir las cosas disfrazadas de chiste: aunque tu chico lo deje pasar en el momento, si lo sigues repitiendo hasta el cansancio, ese tipo de comentario negativo puede terminar por desgastar tu relación e irritar a tu pareja.
- Si tienes una queja, empieza diciendo: “Me sentí mal cuando…” en vez de “Me hartaste cuando…”. Ese simple detalle gramático quietará el tinte criticón y ayudará a que el no se ponga a la defensiva.
- La próxima vez que te enojes, imagina que tu novio es un compañero del trabajo. Jamás te sacarías con el ¿verdad?
- Recuerda que todo lo que dices queda en la memoria, aunque no sea algo que sientes realmente. Por eso, recuerda pensar muy bien lo que dirás antes de hablar.
- Cuando tu amorcito haga algo que te gusta, díselo. Eso ayudará a crear un ambiente positivo.
- Si salen con un grupo grande, busca con él cierto contacto físico peor sin abrumarlo ni estarle todo el tiempo encima.
- Mira a tu pareja directo a los ojos cuando estén teniendo una conversación o cuando esté hablándole a otra gente. Este gesto demuestre que valoras sus opiniones.
- La mayor parte de las parejas que terminan divorciándose experimentaron una pérdida de la confianza. No permitas que se pierda la comunicación entre ustedes y eso será un gran punto a favor.
Si te gustó esta nota y quieres saber más consejos para mantener tu pareja a flote, no te pierdas la segunda parte, que estará disponible el martes próximo.
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