Sopa fría de tomate con almendras

Las sopas frías constituyen un plato ideal para las cenas de verano. Son fáciles y rápidas y tenemos mil posibilidades, por lo que podemos ir variando. Podemos hacer para varios días y guardarla en el frigorífico, con lo que ahorraremos horas de calor en la cocina. Sopa fría de tomate con almendras Ingredientes para 4-6 personas: 800 grs. de tomates muy maduros (a poder ser de los de pera), ¼ de kilo de almendras crudas, la miga de 1 rebanada de pan seco, 1 diente de ajo, 75 ml. de vinagre de Jerez, 200  ml. de aceite de oliva y sal.

 Echa un poco del vinagre de Jerez en un recipiente y deja la miga en remojo.

Pon en un bol los tomates cortados a trozos, el ajo pelado y el resto de los ingredientes y bátelo todo bien. Añade entonces medio litro de agua muy fría, casi helada, y tritura durante unos minutos, hasta que veas que ha cogido una consistencia cremosa.

Prueba la sal y el vinagre, para corregir si lo consideras necesario. También puedes poner más agua si lo encuentras demasiado espeso.

Pon en el frigorífico hasta el día siguiente, que estará muchísimo mejor que recién hecho. Sírvelo muy frío, echando un poquito de aceite de oliva antes de servir y acompañándolo de algún tropezón como gambas, huevo cocido, jamón york, etc.