Un divertido e interesante descenso a la mina: el Museo de Escucha

Para quienes estén pensando en la posibilidad de realizar algún viaje o una estancia de fin de semana por tierras aragonesas, y más concretamente por la provincia de Teruel, un lugar distinto y muy interesante para visitar es el Museo de Escucha, un museo minero muy recomendable para todos pero, de manera especial, si se viaja con niños. Un divertido e interesante descenso a la mina: el Museo de Escucha Escucha es una pequeña y tranquila localidad que se encuentra enclavada en la comarca de las Cuencas Mineras, en Teruel. Su censo ronda el millar de vecinos, y se encuentra a unos 40 minutos de la capital provincial.

En sus alrededores, encontraremos su peculiar museo, que versa sobre la minería. Se caracteriza, especialmente, por ser uno de los pocos del mundo que se encuentra ubicado dentro de una auténtica mina.

Se trata de una antigua mina de la comarca, que antaño había dado trabajo a numerosas familias de la zona, y que era denominada por todos “mina de Se Verá”. Una vez cerrada, se pensó que podía ser el lugar ideal para acercar la minería a todas aquellas personas interesadas en saber y en conocer algo más de esta dura profesión.

El recorrido que haremos por la mina nos permitirá conocer todo tipo de objetos y maquinaria relacionados con la extracción del carbón, como vagonetas, explosivos o martillos. Conoceremos un poco más cómo es la vida de un minero, y seguramente valoraremos más a estos profesionales que a veces han de trabajar en unas condiciones verdaderamente difíciles.

Cabe destacar que la visita a la mina resulta muy divertida y llena de alicientes. Antes de empezar el recorrido reparten a todos los visitantes algunos componentes del equipo de minero: autorrescatador, una petaca alimentaria y otro material, parte de él seguramente desconocido para la mayoría. Por supuesto, no falta el casco-linterna, que suele ser el objeto que más nos ilusiona a todos.

Una vez nos hayamos convertido en mineros, ya podremos empezar el recorrido por la mina. Aquí cabe destacar que lo mejor es el descenso a las galerías inferiores, que se encuentran a 200 metros de profundidad. Dicho descenso lo haremos dentro de las vagonetas, y, teniendo en cuenta que el desnivel es del 33%, si de una cosa podemos estar seguros es de que la diversión durante el mismo está servida.