Una manera diferente de veranear: el camping

Son muchas las personas quienes, a la hora de elegir un alojamiento para sus vacaciones o para un fin de semana, se decantan por un camping. Muchos de los aficionados a esta manera de veranear sostienen que el camping no es sólo una forma de alojamiento sino un estilo de vida. Una manera diferente de veranear: el camping Sea como sea, la realidad es que se trata de un tipo de establecimientos que ofrece muchas ventajas respecto a otros como los hoteles. Para empezar, el más evidente es que el camping te permite más libertad de movimientos, así como estar más al aire libre, en contacto con la naturaleza. Otra de las ventajas, aunque a primera vista parezca una tontería, es que puedes ir todo el día vestido de manera más informal, incluso si quieres en bañador, sin andar cambiándote de ropa para cada ocasión, lo cual es de agradecer.

También es una ventaja, y grande, el hecho de que las vacaciones resultan más económicas, ya que no sólo el importe del alojamiento es más bajo, sino que a ello debemos sumarle el ahorro que significa la posibilidad de cocinar nosotros mismos, para lo cual suelen haber pequeños supermercados e incluso venta de pan a diario.

Si viajas con niños, las ventajas aumentan, ya que no tienes que ir todo el día detrás de ellos, con lo cual puedes también tú disfrutar más de las vacaciones, con la tranquilidad que supone que se encuentren en un recinto cerrado. Además, los pequeños se encuentran más a gusto, ya que pueden jugar y correr a sus anchas, haciendo nuevos amigos y sin sentirse “encorsetados” como se sentirían en un establecimiento como un hotel, en el cual, como es lógico, no podrían comportarse de la misma manera por respeto a la tranquilidad del resto de huéspedes.

Por otro lado, en los últimos años los campings han cambiado mucho, y, aquéllos a quienes les gusta el confort pueden acudir a ellos tranquilamente, ya que en la mayoría van a encontrar tantas comodidades como puede ofrecer un buen hotel, e incluso en algunas ocasiones más.

Así, en la mayoría de campings actualmente alquilan fantásticos bungalows, en los cuales puedes disfrutar de todas las comodidades, con baño privado y en los que no falta de nada.

Además, muchos campings disponen de instalaciones que nada tienen que envidiar a la de los buenos hoteles, incluso en muchos casos las encontraremos mejores, ya que disponen de suficiente espacio para ello. Así, es fácil encontrar equipamientos como campos de deporte, pistas de tenis, sala de juegos, parque infantil, gimnasio, salón social y piscinas, éstas tanto al aire libre como cubiertas y climatizadas. En algunos campings incluso encontramos ya zonas de spa.

También ofrecen un gran número de servicios, tantos que incluso podríamos no tener que salir del recinto si no quisiéramos, ya que ponen a nuestra disposición cajero automático, teléfono público, ordenadores conectados a internet, máquinas expendedoras de bebidas y de aperitivos, y similares. La mayoría además tienen bar y restaurante, e incluso comida hecha para llevar.

Como vemos, alojarse en un camping es una buena opción para unas vacaciones o fin de semana, con tantas ventajas que animamos a quienes no hayan ido nunca a probarlo.