Toma cuerpo de cara al verano. Abdomen. Parte I.

Si quieres saber los protocolos que resultan más eficaces para lucir un estupendo cuerpo este verano para eliminar la grasa localizada, la flacidez y la celulitis, toma nota. Toma cuerpo de cara al verano. Abdomen. Parte I.

Consigue un abdomen perfecto

Acabar con toda la grasa localizada en esta parte del cuerpo y con la distensión muscular, conlleva un esfuerzo que incluye masajes circulatorios y linfáticos o incluso sesiones para modelar la zona de endermología, sin olvidarnos de los ultrasonidos o la radiofrecuencia, que consiguen alisar bastante nuestra piel a la vez que activar la producción de la elastina y del colágeno.

Si lo que buscas es un cambio radical nada mejor que realizar una abdominoplastia que consiste en una liposucción dentro de la pared anterior del abdomen, así como en los laterales junto con una pequeña incisión por encima de la zona del pubis. Desplegando toda la piel hasta la parte del ombligo, se preserva el drenaje linfático en la zona inferior y se evita una acumulación de líquidos. A las dos o tres semanas se puede hacer una vida normal. Con esta técnica se pierde talla y la piel sobrante, consiguiendo recuperar la forma de nuestro cuerpo si se ha sufrido un descenso brusco de peso o tras un embarazo.

Si lo que buscamos en tan solo un retoque, podemos recurrir a la radiofrecuencia pixelada, que consiste en elevar la temperatura natural de nuestra piel a nivel superficial y profundo, para que se produzca colágeno nuevo que es el responsable de la firmeza y elasticidad de ésta. Con esta técnica se reduce el tejido adiposo junto con las estrías que puedan existir en nuestra piel además de tensar y reafirmar toda la zona y aumentar la circulación sanguínea.

Técnicas para mejorar el abdomen

Existe un equipo de cavitación que produce unos ultrasonidos de baja intensidad, conocido como lipaway y que crean burbujas entre las células de la grasa para que se rompan, siendo metabolizada después por el propio organismo de una manera natural. El tratamiento debe completarse con masajes de drenaje linfático a través de medios mecánicos o manuales. Se consigue reducir de tres a seis centímetros y acaba con toda la grasa de la tripa y de las caderas.

La endermología LPG consiste en un sistema de aspiración que se realiza mediante un masaje intenso y muy profundo en el tejido subcutáneo y en la piel, para poder destruir la grasa localizada. De esta manera se estimula el sistema linfático y venoso y para no traumatizar demasiado la piel, se coloca una malla para cubrir por completo el cuerpo. De esta manera se trata la celulitis así como la grasa localizada, reduciendo el volumen del cuerpo y eliminado los líquidos sobrantes. También es utilizada para preparar la zona antes de la liposucción y para después, ya que mejora el edema producido en este tipo de técnicas.