Actitud Trabajadora

Como bien hemos analizado, hoy en día la situación laboral femenina en el mundo se ha posicionado tan firmemente en el mercado que se puede afirmar que se encuentran, casi, cabeza a cabeza con los hombres.
Esta vez profundizaremos en la, tan temida entrevista laboral, paso posterior luego de haber sido aprobado tu Currículo Vital, y de ese llamado lleno de suspenso en donde te anuncian tu cita en día y horario. Comenzaremos por analizar paso a paso esta situación clave en tu vida.

Preparación: Debes informarte sobre la empresa de la que has recibido el llamado, y sobre el puesto que ocuparías (en el caso de ser seleccionada). Esta información sin dudas impactará al que te entreviste, y se activará la imaginación del empleador contigo en el puesto.
Además de psiquica debes prepararte físicamente, es decir, buscar una vestimenta acorde, lo mejor sería que te lookees, por ejemplo: Si fuera el caso de una oficina, los jeans y el escote no son la mejor opción.

Desarrollo: Actitud mujer! Actitud! Debes trasmitir interés por el empleo y entusiasmo al hablar, como si ya fuera tuyo. En el caso de que saeas primeriza en el ambiente, ignora tu inexperiencia en el puesto, puedes disimular contándo anécdotas para ilustrar tus virtudes. También atrévete a volar alto. Sí puedes, debes ponerte la camiseta de la empresa y dar ejemplos (nuevamente) de como defenderías tu puesto con uñas y dientes.

Nudo: ¡Chan! ¡Danger! Debes evitar ciertas palabritas, y utilizar otras con “moderación”. Piensa antes de hablar y evita comentarios ridículos como “A parte, el sushi me sale como los dioses”, o ir inmediatamente al punto preguntando el valor de tu sueldo. Todo a su debido tiempo. ¡Atención! Puede suceder que te encuentres atrapada sin saber que responder. ¿Solución? Tiempo.

Desenlace: ¿Qué hacer después de la entrevista? Comenzemos…si te fue bien, podrías agradecer por medio de una carta (en la que tambien puedes agregar temas que seguro te olvidaste al cerrar la puerta cuando te retiraste). Ahora, si has sido despedida con la decepcionante frase “cualquier cosita te llamamos”, y en dos semanas no has recibido noticia algunas, tienes todo el permiso y el derecho de buscar la manera de insistir (aunque no es recomendable), y será con un seguimiento informal, como un mail, en el que muestras tu interés. Persevera y…¡triunfarás!

«Ignora tus defectos y resalta tus virtudes».