Adiós al estrés

Pautas para reducirlo y mejorar nuestra calidad de vida. Adiós al estrés Un buen baño con agua caliente y sales perfumadas parece ser el plan ideal para evitar el estrés. Pero no siempre es suficiente ni posible. Sobre todo para los que llegan a fin de año con cansancio acumulado y necesidad de tomarse vacaciones.

«Primero hay que reconocer el estrés para luego reducirlo«, coinciden los especialistas. Es importante saber si las fuentes del estrés son ambientales,  sociales o psicológicas.

Los especialistas recomiendan aprender ejercicios de respiración y relajación para aliviar la tensión corporal, seguir una dieta balanceada y comprometerse a hacer actividad física.

Hay que ocuparse en lugar de preocuparse, reconocer como los pensamientos condicionan los sentimientos y la conducta. También tenemos que hacer una cosa por vez. Por ejemplo, si estamos hablando con alguien, tomarnos el tiempo para escucharlo y no interrumpir para atender el celular.

Saber decir que no es una manera de evitar complicaciones a futuro. Tenemos que distinguir cuando algo demandaría un esfuerzo por encima de nuestros recursos. No hay que contestar que si inmediatamente sin estar seguros de que contaremos con las energías y tiempo necesarios.

Y convertir al reloj en un aliado: despertarse 20 minutos antes para sortear las complicaciones diarias, dejar todo preparado la noche anterior y evitar las corridas de último momento, usar el fin de semana para cambiar el ritmo y agendar tiempo de descanso y ocio. Si es con baño relajante incluido, mejor.

Consejos
Aprender ejercicios de respiración y relajación.
Ocuparse en lugar de preocuparse.
Hacer una dieta balanceada.
Comunicarse de manera efectiva.
Practicar deportes.
Divertirse.