Aprende a elaborar estos bonitos portavelas que le darán un toque exótico a tu hogar y que, además son sencillísimos de conseguir.
Con un par de pasos, sencillos materiales, y tu creatividad, lograrás resultados fascinantes. ¿A qué esperas? ¡Manos a la obra! Como ya os vengo contando en anteriores artículos, para aprender a realizar una buena decoración de interiores, lo fundamental es saber fijarse en los pequeños detalles, para lograr a través de ellos grandes resultados.
Pero además hay determinados artículos que dotarán tus estancias aún de más viveza y ambientación. Este es sin duda el caso de las velas, y puesto que en otro de mis anteriores artículos os mostró como elaborarlas con tarros de cristal, hoy os enseñará el modo de fabricación de otro tipo de porta-velas también interesante.
Para comenzar con nuestra creación, que por cierto, ya verás que es muy sencilla y logra unos resultados sorprendente, necesitarás:
- Vasos de forma de tubos.
- Papel de seda de muchos colores que te gusten combinados entre sí.
- Tijeras.
- Velas.
- Cinta adhesiva.
- Regla.
- Lapiz o boli.
¡Pues sí! Como ya habrás podido imaginarte, los portavelas que vamos a elaborar estarán forrados de papel seda, lo que les dará un magnífico acabado, que incluso podría hacerlas pasar por lanparitas de mesita de noche.
Para aprender a hacerlo sólo neceitarás tomar nota de los siguientes pasos:
- Mide la altura de los vasos y corta un papel que hará de base sobre el vaso y que pegaremos con la cinta adhesiva.
- Con el resto de los papeles de color seda de la gama de los colores que hayas elegido para forrar el portavelas corta trozos de diferentes tamaños y vete superponiéndolos a diferentes alturas, enrollándolos y pegándolos con la cinta.
- Tras esto ya tendrás listos los porta-velas, ¡ahora solo falta buscarles un hueco en tu hogar y hacerlo brillar con luz propia!