Dale un clima especial a calla rincón de tu casa eligiendo la paleta correcta. Para lograr un hogar agradable, no son los muebles los que causan el mayor impacto, sino la energía que el ambiente irradia. Es importante que sepas que tipo de vibración quieres transmitir en ciertos rincones. Una vez que lo hayas decidido, usa los colores que naturalmente conducen a estados de alegría o calma, para alcanzar de un modo más eficaz esa onda. Acá, el modo en que los diferentes tonos te estimulan:
– Los neutros montan una escena serena y elegante. La calidez de los blanquecinos y tonos marfil convierte tu cuarto en un paraíso calmo.
Son tonos muy sutiles; aumenta el factor sensual con accesorios que tengan texturas. Por ejemplo, si los colores de tu baño son crema y blanco, cuelga toallitas fluo para agregar dimensión, o coloca almohadones metalizados en un living demasiado neutro.
– Los cítricos aportan energía. Y no solo te hacen sentir optimista; un amarillo brillante o un verde limón favorecen las conversaciones divertidas y animadas.
Puedes equilibrar la vibración alta de estos colores colocando toques de tonos neutros. Agrega detalles en blanco o marrón para darle un aire actual a tu espacio.
– Naranja, paprika y rojo carmín son emocionalmente intensos, y suman un picante ardor en el ambiente. Ideales para el comedor, porque favorecen la digestión, son tonos relacionados con el amor, la pasión y el deseo, también pueden ser ligados al poder y la determinación.
Agrega muebles, sábanas o almohadones oscuros. Puedes cambiar la onda intensa a una vibración más terrenal.
– Una tibia paleta de azules y grises te suaviza mentalmente, y te ayuda a desestresarte.
Porque el azul esta asociado tanto al cielo como al agua, elementos que transmiten profundidad y estabilidad.
– No combines un celeste pálido con blanco, para que no quede con un look maternidad. Mejor, combínalo con neutros fuertes como los chocolates.