Las tendencias en la decoración, durante los últimos años, es evidente que se han encaminado hacia el realce de lo natural. Los materiales naturales para decorar las paredes o aplicados al mobiliario y complementos son los más apreciados. En realidad, suponen, en cierta manera, una vuelta a lo genuino, a la vida sencilla de antaño y a querer dar a cada estancia y rincón de nuestra casa el encanto que sólo lo natural puede dar. Así, la piedra, la madera, el algodón, el cáñamo o la lana, son materiales muy en boga actualmente en materia de decoración. No podemos olvidarnos, pues, a la hora de pensar en complementos que adornen nuestra casa, en una de las cosas más naturales y atractivas que existen: las flores.
Decorar con las flores es tarea fácil, ya que dan vida y alegría a cualquier rincón de la casa. Aportan color y aroma a las diferentes estancias y quedan atractivas en todas partes. Sin embargo, para que el efecto sea más decorativo, deberemos tener en cuenta la maceta o recipiente en que las colocamos, intentando que tanto el material como el color de la misma esté en consonancia con el lugar elegido para ponerla.
Con un poco de imaginación, podemos pensar en muchas maneras de crear originales recipientes para las flores, haciendo que combinen a la perfección con aquello que las rodea.
Si las flores son frescas, podemos usar botes de colores diferentes, copas de las que se usan para el coñac o incluso vasos largos. Una garrafa o cualquier envase parecido puede también servir.
Si son flores plantadas en la tierra, las posibilidades son infinitas, sólo dependen de tu imaginación. Si disponemos de cajoncitos de algún mueble en desuso, podemos usarlos tal cual o lijarlos y pintarlos del color que nos parezca adecuado, incluso realizando algunos dibujos de colores en ellos.
Al igual que los cajones, se pueden usar multitud de objetos, como alguna olla de barro, coladores, regaderas, un antiguo lavabo, una cesta de mimbre, una antigua tetera… En fin, todo artículo que sirva como recipiente nos puede servir también como maceta o jardinera.
Otra opción es comprar macetas de las de barro y pintarlas de uno o varios colores, haciendo con varias unas bonitas combinaciones. Podemos incluso aplicarles alguna técnica de envejecimiento o forrarlas con algún material como cañas o cuerda.