Agua de rosas siempre en casa

El agua de rosas es muy preciada en la industria cosmética. Puedes usarla como tónico facial, como complemento de mascarillas naturales, para perfumar la cas, en baños relajantes, como atomizador en el cuerpo y en alimentos. Agua de rosas siempre en casa La receta para elaborar agua de rosas es muy sencilla. El agua de rosas tiene propiedades calmantes, tonificantes, relajantes e incluso astringentes lo que la hace ideal para las pieles sensibles, grasas o con poros abiertos.

Paso a paso
Ve a la floristería y escoje las rosas rojas más lindas y brillantes que consigas, huélelas antes de comprarlas para que asegurarte que su fragancia es fuerte. Compra además hojas de frambuesa secas y unas florcitas de manzanilla.

Compra también en cualquier farmacia una botella de agua destilada y en el supermercado una botellita de vinagre de sidra.

Quita todos los pétalos de las rosas y desecha los tallos y las hojas. Pica en trozos bien pequeñitos todos los pétalos hasta tener 45 ml o el equivalente a 3 cucharadas grandes.

Toma un cuenco lo suficientemente grande para mezclar los pétalos de rosas con 15 ml (una cucharada) de hojas de frambuesa y 5 ml (una cucharadita) de las flores de manzanilla.

Calienta en una olla, pero sin dejar hervir 150 ml o 2/3 de taza de agua destilada junto con 45 ml ó 3 cucharadas de vinagre de sidra.

Vierte el líquido caliente sobre las hojas y flores. Remueve muy bien la mezcla y déjala enfriar. Cuando esté fría cúbrela con una película de papel de plástico autoadherente y déjala en la nevera durante una semana.

Una vez pasado este tiempo cuela bien el líquido y pónlo en un cuenco.

Aparte, en un bol pequeño, mezcla 5 ml (1 cucharadita) de bórax con 200 ml (3/4 de taza) de agua de rosas. Añádelo al líquido anterior y remuévalo bien.

Para terminar todo pon el agua de rosas en una botella y etiquétalo y refrigéralo. El punto óptimo de utilización de este refrescante facial o corporal es cuando se aplica recién sacado de la nevera.