A no ser que vivas en una casa bastante amplia y que cuenta con numerosos armarios, la simple acción de cambiar la ropa de invierno por la de verano o al contrario, puede llegar a suponer un ligero drama. Toma nota de unas sencillas ideas para ayudarte a evitar tener el abrigo colgado todo el año en el perchero o el biquini guardado en el cajón junto con la ropa interior.
Para conservar la ropa y que te dure
Si no vives en una zona que goce de un clima suave, será necesario que vayas rotando la ropa de todo el año y es que organizarla correctamente resulta imprescindible para mantenerla en unas buenas condiciones, para mantener la casa en orden y para que te dé menos pereza a la hora de realizar el siguiente cambio.
Selección de las perchas
Si has optado por colgar la ropa de temporada en lugar de guardarlas en cajones, maletas, etc., deberás elegir las perchas más adecuadas. Para ello deberás evitar las perchas que sean de alambre fino y elegir las que son de madera o acolchadas.
Lavar la ropa antes de guardarla
Aunque parezca que la ropa está muy limpia, es necesario lavarla o limpiarla en seco antes de almacenarla. Los aceites de nuestro cuerpo atraen las polillas y provocan un olor muy persistente si no se ha quitado éste convenientemente antes de guardar la ropa. Olvídate también de las bolsas de plástico ya que éstas retienen la humedad fomentando la aparición del moho. Utiliza en su lugar bolsas de algodón o incluso recicla la ropa de cama que esté vieja para utilizarla como “sacos”.
Ropa sin polillas
Para proteger nuestra ropa de fibras naturales, utiliza bolsas de naftalina ya que ésta mata las larvas, aunque es muy importante evitar que toque la ropa que vayamos a almacenar. Cuando llegue el momento de volver a ponerte la ropa, límpiala o al menos airéala bien durante un día entero antes de hacerlo.
Guardar la ropa en cajas
Intenta evitar guardar la ropa en cajas que sean de cartón ya que este es muy ácido y su pegamento atrae a insectos y bichos. Las de plástico con tapas son más seguras y no dañan las fibras ni atraen insectos.
¿Dónde guardarla?
Una vez hayamos lavado, revisado y ordenado la ropa de temporada llega el momento de elegir donde guardarla, para ello podemos echar mano de las socorridas maletas junto con una nota adhesiva o una etiqueta colocada en su interior, que nos será de gran utilidad para identificar más tarde el contenido.
Estas maletas podemos guardarlas debajo de la cama o poner un armario hecho a medida o incluso prefabricado en la terraza para este fin, que resultará un desahogo muy importante.
Si cuentas con un armario alto, también puedes aprovechar el espacio para almacenar la ropa en sus altillos. Si añadimos una barra cerca de su parte superior, conseguiremos almacenar de una manera accesible y segura toda nuestra ropa.