Hace unos días, hablábamos, en un artículo anterior, sobre algunas técnicas existentes para pintar paredes de manera rápida con un resultado que puede llegar a ser espectacular, depende ya de la gracia que pongamos en ello. En aquella ocasión el artículo versó sobre la técnica del Otra técnica similar es la llamada del “trapeado”. La diferencia con la anterior, como podemos suponer, es que en vez de una esponja se usa, para la aplicación de la pintura, un trapo, lo cual nos da de hecho más margen de maniobra, pudiéndose conseguir unos resultados espectaculares.
Se trata de una técnica rápida y muy útil si tenemos alguna pared con imperfecciones y queremos dejarla bien en poco tiempo y con poco dinero. También es muy idóneo para perfeccionar un pequeño rincón o darle un toque diferente.
Podemos realizar esta técnica usando diferentes tipos de pintura, ya sea acrílica, al agua, látex, óleo u otras.
Lo primero que deberemos hacer es dar una rápida capa de pintura base en toda la superficie a pintar, y dejarla que se seque bien.
A continuación, vamos a aplicar la técnica del trapeado, que puede consistir tanto en quitar pintura como en añadirla, dependiendo del resultado que queramos.
La técnica más común es la de quitar pintura, consistente en que, una vez seca la capa base, se da una capa con un segundo color, con la pintura bien diluida. Después de los brochazos, inmediatamente se ha de pasar el trapo apretando, pudiendo hacerlo en rayas, en círculos, etc, que dejarán ver el color base. Según el movimiento que le demos al trapo nos saldrá un dibujo u otro, que deberemos probar antes en un papel. Con esta técnica es mejor que las personas que pintan sean dos, ya que mientras una usa la brocha la otra puede pasar el trapo.
La segunda técnica, la de añadir pintura, consiste en poner pintura, del segundo color, en el trapo, que antes ha de humedecerse. La pintura se irá aplicando entonces directamente con el trapo.
Uses la técnica que uses, procura que la presión que le das al trapo sea todo el rato la misma para que se vea después la pintura uniforme.