En el momento en que una relación de pareja se acaba, se experimentan distintos tipos de sentimientos que van desde la ira hasta el llanto, pasando por la melancolía y la depresión. Así como cuando aparece el amor es algo mágico, cuando se acaba puede llegar a convertirse en un 
¿Cómo empezar una nueva etapa?
Terminar con una relación nunca resulta algo agradable, pero saber como hay que enfrentar esta nueva etapa de nuestra vida sin rencor ni culpa, nos permitirá volver a comenzar y prepararnos para poder recibir al verdadero amor con las puertas abiertas.
Algunos consejos pueden ser:
- No es nada malo entregarse al alguien. El amor es entrega, efectivamente, pero tampoco es demasiado bueno darlo absolutamente todo, porque si a quien se lo damos, llega un momento en que se aleja de nosotros, nos quedaremos completamente vacíos.
- No hay que perder la libertad a la hora de amar. No hay que dejar de ser nunca uno mismo y menos renunciar a los proyectos e ilusionas personales.
- Hay que amar sin miedo.
- Y evitar sobre todas las cosas, que el amor se convierta en una dependencia y mucho menos aún en una adicción.
Analgésicos emocionales
¿Qué hay que hacer cuando termina una relación? ¿Debemos encerrarnos en nosotros mismos? ¿Es bueno que lloremos? ¿Obsesionarnos con encontrar la causa por la que esta relación ha llegado a su fin? ¿Cerrar las puertas al amor?
Todas estas actitudes lo único que harán es llenarnos de rencor y cegarnos para poder relacionarnos nuevamente. Por esto, las recomendaciones a seguir son:
- Mantener una actitud positiva. Es normal que al principio resulte una situación demasiado dolorosa, pero con el tiempo y aunque parezca imposible, el dolor desaparece y todo se va olvidando.
- Es muy importante evitar los pensamientos destructivos. El pensar en que estará haciendo o con quién estará la otra persona, son pensamientos que nada más que sirven para autodestruirse. Hay que dejar de pensar en el pasado y centrarse en el presente y sobre todo, con una buena actitud positiva.
- No hay que castigarse. Muchísimas personas no pueden dejar de culparse por lo que ha sucedido o pensar que podría haber sido distinto si hubieran tomado otra actitud.
- Evitar el contacto con la otra persona. El dolor no se va a ir por llamar por teléfono o ir en busca de la otra persona, por eso lo mejor es evitarlo.
- No hay que buscar un sustituto y decir adiós al enfado. Cuando tiene lugar una ruptura, además de tristeza, se genera mucha rabia. Para ello se pueden realizar actividades que descarguen energía y que requieran fuerza.
- Recurrir a los amigos. En estos momentos, el apoyo principal será la familia y los amigos con quienes se pueden compartir los sentimientos de depresión o de tristeza que ayudará a aliviar el dolor.
- Fundamental es mantenerse activo y no quedarse solo en casa sin nada que hacer. Puede ser un buen momento para empezar a practicar algún deporte o apuntarse a algún curso que nos interese y que hasta ahora no habíamos realizado.
