A tan solo una hora y media de distancia de Londres está la ciudad de Bath, considerada como Patrimonio de la Humanidad y famosa por su más que interesante vida cultural y por sus termas romanas. Conoce uno de los lugares más hermoso de toda Inglaterra.
¿Qué hacer en Bath?
Podrás pasear por uno de los puentes más románticos de todo el mundo, visitar sus termas romanas, donde podrás hacerte una idea de cómo disfrutaban de la vida en esa época o simplemente recorrer sus calles georgianas repletas de tesoros. Podrá también degustar los mejores platos de la gastronomía inglesa o tomar una pinta en los pubs más emblemáticos del país.
Por algo esta ciudad, ubicada a 156 kilómetros de distancia de la capital de Inglaterra, alcanzó durante el siglo XVIII una gran fama, llegando a ser considerada como un auténtico paraíso donde disfrutar de unos días de descanso. Esta fama fue conseguida en su mayor parte, por sus termas, en las que se reunía lo más selecto de todo el país.
Podrás atravesar también el río Avon, cuya construcción se terminó en el año 1773 y que está considerado como uno de los iconos de la ciudad, así como uno de los cinco puentes habitados del mundo entero.
¿Cómo llegar a Bath?
Existen vuelos directos que comunican esta ciudad con el resto del mundo a un precio muy económico. Y además desde el mismo aeropuerto de Bath se puede llegar al centro de la ciudad tanto en autobuses como en taxis, ya que la distancia que lo separa es de poco más de 30 kilómetros.
Lugares de interés en Bath
Son millones de turistas los que la ciudad de Bath recibe cada año, incluso para pasar simplemente una jornada. Y es que desde Londres se puede acceder a esta ciudad en tren en un viaje que dura aproximadamente 90 minutos. Aun así es cierto, que cada vez son más los viajeros que alargan su estancia en Bath para poder ir descubriendo, sin ninguna prisa, cada uno de los sorprendentes e impresionantes rincones de esta peculiar metrópolis, para lo que no hace falta ni siquiera la utilización de transportes, puesto que se puede conocer caminando, eso sí, con tranquilidad.
Ente algunos de los más destacados se encuentra el centro Jane Austen, donde se puede contemplar una exposición permanente de la vida de esta escritora. El museo de la Moda, donde se repasa la historia de los vestidos gracias a sus piezas originales pertenecientes a distintos siglos, hace referencia al vestir de los británicos siempre tan de moda.
En Assembli Rooims se organizaban antiguamente los bailes más divertidos de la época georgiana y en el museo Holburne es posible disfrutar de exposiciones de diferentes pintores. No dejes de visitar tampoco el Teatro Real, uno de los más antiguos de toda Gran Bretaña y por supuesto, sus parques, salones de té y tiendas diversas. En cualquier caso, seguro que en Bath no vas a tener la oportunidad de aburrirte ni un solo segundo.