Posturas de yoga para perder peso

Considerar el yoga para perder peso es una opción muy eficaz, pudiendo ser uno de los mejores aliados si te encuentras en un proceso de adelgazamiento. Y es que además de resultar muy útil para tonificar los músculos y para relajarse, existen determinadas posturas que resultan muy adecuadas para este fin. Toma nota de las mejores posturas para perder peso y comienza su práctica hoy mismo.

Sauce

Esta postura ayuda a definir y reafirmar los abdominales. Para hacerla tienes que pararte con los pies juntos y colocar el pie izquierdo sobre la rodilla derecha para crear una especie de ángulo. Pon las palmas de las manos sobre el pecho y respira un par de veces. En la tercera inhalación, tienes que levantar los brazos manteniendo juntas las manos. Exhala mientras doblas hacia la izquierda el toros. Inhala de nuevo y estira. Tienes que repetir el proceso con cada pie entre tres y cinco veces.

Creciente

Esta postura es perfecta para reducir caderas y abdomen. Para realizarla tienes que estar de pie con los pies juntos y los brazos a lo largo del cuerpo. A continuación inhala y levanta tus brazos hacia los lados de tu cabeza. Exhala y dobla el cuerpo hacia delante. Vuelve a inhalar y en el momento de exhalar, pasa tu pierna derecha hacia atrás, dejándola extendida mientras la derecha se queda flexionada. Inhala y levanta tus brazos. Exhala y vuelve a la posición original. Repite esta postura con cada pie a diario cinco veces.

Arco

Para realizar esta posición se necesita mucho esfuerzo y energía por lo que quemarás muchas calorías y mantendrás tu metabolismo funcionando de manera más rápida durante el resto del día, además fortalecerá también los músculos del pecho y de la espalda.
Colócate tumbada boca abajo con las manos a lo largo del cuerpo y con las palmas hacia arriba. Dobla las rodillas y tomar con tus manos los tobillos. Debes mantener cierta distancia entre la cadera y los pies y permanecer en esta posición durante treinta segundos. Repetir tres veces.

Puente

Esta posición ayuda a masajear la glándula tiroidea, lo que favorece la liberación de las hormonas que controlan e lmetabolismo.
Acostada boca arriba, flexionan las piernas y separa los pies a la altura de la cadera. Levanta ésta y mantenla paralela al suelo. Coloca los brazos debajo de ti intentando entrelazar las manos. Intenta mantener durante un minuto esta posición. Baja y repite un par de veces más.

Arado

Con esta postura se mejora la circulación de la sangre. Practicándola se liberan más endorfinas y hormonas encargadas de regular el metabolismo. Acuéstate de espaldas con las piernas bien estiradas hacia el techo y los brazos pegados a tu cuerpo con las palmas hacia abajo. Con las mismas haz fuerza y levanta la cadera. Lleva las piernas hacia atrás intentando que toquen el suelo.

Flotar

Con esta última posición reafirmarás los hombros, los brazos, la espalda y los abdominales. Con las piernas extendidas apóyate sobre los dedos de los pies hasta lograr que las palmas estén apoyadas, los abdominales apretados y los brazos flexionados. Mantén durante un segundo esta posición y baja. Repite como mínimo tres veces.