Preguntas frecuentes sobre la tiroides. Parte I

La tiroides es una glándula que resulta esencial para el normal funcionamiento de nuestro organismo por lo que su control es muy necesario para que cualquier persona se mantenga sana, sin olvidar que una consulta realizada a tiempo puede ser lo que salve nuestra vida. Preguntas frecuentes sobre la tiroides. Parte I

¿Qué es la tiroides?

Es una glándula endocrina ubicada en la base de nuestro cuello por debajo de la nuez conocida como Adán y que tiene forma de una mariposa.

¿Cuál es su función?

Almacena, produce y libera las hormonas T3 y T4 en nuestro torrente sanguíneo que influyen en la actividad de la mayor parte de las células de nuestro cuerpo, a la vez que controlan el metabolismo.

Cuando los niveles de estas hormonas en la sangre son bajos, nuestro cuerpo funcionará más lentamente, algo que se conoce como hipotiroidismo. Por el contrario si existe demasiada hormona tiroidea en nuestra sangre, el organismo trabajará más rápido y a esta condición se la conoce como hipertiroidismo.

En cualquier caso la función de esta glándula viene controlada por otra conocida como hipófisis y esta a su vez por el hipotálamo ubicado a nivel cerebral. Si la cantidad de hormonas de la tiroides no es suficiente, la hipófisis y el hipotálamo ponen en marcha una serie de mecanismos para aumentar la liberación de la T3 y de la T4 en la sangre. Si por el contrario notan un exceso de estas hormonas, disminuirán la liberación de ellas. En cualquier caso estos dos tipos de mecanismos se alteran cuando existe una enfermedad.

¿Cómo puede el endocrino evaluar la tiroides?

Normalmente al llegar el paciente a la consulta del doctor se le realizará una historia clínica y un examen físico que incluirá una palpación de la tiroides pudiendo solicitarse si es necesario un análisis de sangre, una ecografía de la tiroides, un centellograma, una tomografía de tiroides y una punción de los nódulos tiroideos.

Hipotiroidismo

Este cuadro clínico se caracteriza por una disminución de la producción de hormonas de la tiroides ya sea por una alteración en la propia glándula o por una disminución en la estimulación desde el hipotálamo o desde la hipófisis.

Esta enfermedad suele ser bastante frecuente sobre todo en las mujeres siendo su prevalencia de un 2% en las mujeres adultas y de un 0,2% en los hombres adultos.

Este cuadro puede tener un comienzo lento y progresivo manifestando las personas que lo padecen una intolerancia al frío, modificaciones en su peso, cansancio, voz ronca, caída del pelo, uñas frágiles, piel seca y pálida, trastornos en la memoria o alteración del ciclo menstrual entre otras.

Las causas más frecuentes de esta enfermedad son una tiroiditis crónica autoinmune, un déficit de yodo en las dietas o una post cirugía de tiroides.

El tratamiento está basado en la administración de hormonas, existiendo preparados diferentes para esta terapia hormonal aunque la elección más frecuente es el uso de levotiroxina sobre todo en el inicio del mismo.

Este tratamiento debe realizarse con mucha precaución sobre todo en los casos de evolución prolongada, graves, en personas que cuenten con una edad avanzada, que sean hipertensas, que tengas arritmias o que padezcan de una insuficiencia cardiaca.