Una camiseta diferente con punto de cruz

En la manualidad de hoy buscaremos una de aquellas camisetas que nunca nos ponemos porque no nos gusta mucho, o incluso aquélla que no hemos tirado porque sí nos gusta pero hicimos en ella una mancha que no conseguimos quitar. Una camiseta diferente con punto de cruz Cualquiera de las que tenemos apartadas y que no salen del cajón nos sirven para la manualidad de hoy, que consistirá en ponerle un bonito dibujo hecho con punto de cruz.

En la red o en cualquier revista encontrarás un montón de muestras. Si no has hecho nunca este punto, aunque es muy fácil, coge una muestra sencilla, con sólo 2 ó 3 colores. Si ya tienes experiencia, encontrarás verdaderas obras de arte.

Materiales para su elaboración:

–    Una camiseta
–    Una muestra de un dibujo a punto de cruz
–    Un trozo de rejilla blanca para punto de cruz, que encontrarás en mercerías
–    Hilos de bordar, de los colores necesarios según tu dibujo
–    Tijeras
–    Hilo de coser, da igual el color
–    Aguja
–    Algunos imperdibles pequeños

Manos a la obra:

–    Extiende la camiseta encima de una mesa de manera que quede muy plana.
–    Pon encima de ella la rejilla, abarcando el trozo en el que quieras que vaya el dibujo, y teniendo en cuenta que debe ser más grande que éste.
–    Cuando la tengas en el lugar adecuado, sujétala a la parte delantera de la camiseta con los imperdibles, para que no se mueva, y seguidamente, con el hilo de coser, coses todo el alrededor de la rejilla. Sin muchos miramientos, sólo lo suficiente para que no se desplace al hacer el dibujo.
–    Ahora ya puedes empezar a hacer el dibujo con los hilos de colores, siguiendo la muestra, tal como lo haces en la tela de bordar.
–    Una vez terminado el dibujo, saca el hilo con el que has contorneado la rejilla. La rejilla deberás sacarla con un poco de paciencia, tirando de cada hilo, uno por uno, hasta que en la camiseta sólo quede tu bordado.

Y ya está, tu camiseta ha dado un cambio radical en cuestión de poco tiempo.