¿Cómo calcular nuestro índice de masa corporal?

Para saber si tenemos un peso adecuado en relación con nuestra talla o si sufrimos por el contrario de sobrepeso, tan sólo es necesario realizar una sencilla fórmula teniendo en cuenta nuestra estatura, edad y peso. Esta relación entra la talla y el peso es lo que normalmente se conoce como IMC o índice de masa corporal. ¿Cómo calcular nuestro índice de masa corporal?

¿Para qué sirve el IMC?

Normalmente cuando acudimos a la consulta del médico, nos suelen medir y pesar, aunque en realidad el peso en sí mismo no significa demasiado, si no se le relaciona con la estatura de la persona. Los médicos al usar el IMC pueden llegar a determinar si tenemos una deficiencia en nuestro peso o si por el contrario hay un exceso del mismo. Cuando el IMC es alto, la persona que lo padece tiene un riesgo mayor de sufrir algún tipo de problemas de salud como por ejemplo hipertensión, enfermedades cardiovasculares, diabetes del tipo 2, problemas en la vesícula, ataques cerebrovasculares u osteoartritis. Un sobrepeso también puede aumentar el riesgo de que se sufran algunos tipos de cáncer como el de mama, el de próstata o el de endometrio.

¿Cómo podemos calcular el IMC?

El índice de masa corporal se puede averiguar si dividimos nuestro peso por el cuadrado de nuestra altura. Un ejemplo: si medimos de altura 1,60 centímetros y nuestro peso es de 65 kilos, se debe dividir el resultado por el producto resultante de 1,60 por 1,60, que en este caso sería 2,56, lo que nos dará como resultado 25,39, cuando el resultado es mayor de 26 o más, es necesario someterse a una dieta de adelgazamiento para eliminar el sobrepeso.

Para interpretar correctamente el resultado hay que tener en cuenta algunos intervalos:

  • El resultado comprendido entre un 18,5 y un 25 se cataloga como saludable.
  • Si nuestro IMC está por debajo de un 18, puede indicarnos algún problema de salud, una mala nutrición o delgadez.
  • Si está por encima de los 25 nos indicará que existe un sobrepeso.
  • Más alto de los 30, indica una obesidad leve y si está por encima de los 40, existe una obesidad mórbida que puede incluso requerir de una operación quirúrgica.

Todos estos rangos pueden ser aplicados en personas adultas que cuenten entre 25 y 35 añis de edad y van aumentando un punto por cada diez años, siempre por encima de los 25 años de edad.

Aunque el cálculo del índice de masa corporal funciona en la mayoría de las personas, hay que tener en cuenta algunas excepciones:

  • Si eres una persona atlética o musculosa, es posible que tengas un IMC alto aunque un peso saludable, ya que hay que recordar, que los músculos pesan bastante más que las grasas.
  • También es posible que se tenga un índice de masa corporal normal pero tener una nutrición algo deficiente.

El nutricionista tendrá también en cuenta otro tipo de factores, como puede ser la movilidad de una persona, es decir si es sedentaria o activa o  si es una mujer y se encuentra embarazada, entre algunos ejemplos.