Congela la grasa de tu cuerpo

Hasta ahora habíamos conseguido atacar la grasa de nuestro cuerpo con radiofrecuencias, con ultrasonidos o con sesiones de mesoterapia entre otros. Ahora además podemos congelarla gracias a la criolipólisis que la pone bajo cero para eliminarla definitivamente. Congela la grasa de tu cuerpo

¿Qué es la criolipólisis?

Es una tecnología nueva para la eliminación de la grasa localizada sin necesidad de cirugía y que la elimina mediante el frío. Es un tratamiento apenas invasivo y conservador que consigue muy buenos resultados.

Se descubrió en el año 2008 por dos dermatólogos norteamericanos de prestigio, que comprobaron que el tejido adiposo resulta especialmente sensible al frío. Para demostrar esto, llevaron a cabo un estudio que consistía en aplicar frío sobre una superficie de la piel siendo la temperatura usada bastante superior a la que se había venido empleando en la criocirugía, técnica por otra parte utilizada para la eliminación de las verrugas o para el tratamiento de otras lesiones cutáneas.

El tiempo de aplicación también se alargó y se logró prolongar lo necesario para poder extraer calor de esa grasa subcutánea.

¿Cómo funciona la criolipólisis?

En primer lugar se marca la zona donde va a aplicarse siendo las más solicitadas el abdomen y las cartucheras.

Posteriormente se aplica sobre la zona a tratar un gel y se coloca después un transductor que combina el frío con presión de vació para así poder captar el tejido graso subcutáneo. La temperatura durante el proceso es de 2 grados y centígrados y 4 grados centígrados.

El proceso de degradación  se realiza por cristalización. Cuando los  adipocitos o las células grasas se han “cristalizado” tiene lugar la rotura de las mismas.

Las células grasas comienzan a liberar de una manera gradual los lípidos de su interior, ago que puede tardar entre dos y seis semanas en completarse.

Después de una de estas sesiones el área que se ha tratado pude estar inflamada y con algo de volumen, algo que desaparecerá en un par de semanas como máximo. También es normal que pueda aparecer algún hematoma.

Cada zona que se desee tratar necesitará de unos 30 minutos aproximadamente y debes saber que apenas notarás molestias, en todo caso al principio que puedes sentir como si te faltara algo de aire pero una vez te acostumbras a dicha sensación, el tiempo resulta bastante llevadero.

En cualquier caso cuando el procedimiento empiece, sentirás en la zona tratada una sensación de frío que desaparecerá en unos pocos minutos.

No existe una período de recuperación tras este tratamiento por lo que podrás seguir con tus actividades normales sin ningún tipo de problemas.

Una vez realizado el tratamiento, a los dos días te tendrán que realizar un drenaje linfático junto con una mesoterapia drenante para ayudar a eliminar la grasa y reducir la inflamación.

Durante cuatro o cinco días te recomendarán que lleves una faja para cubrir las zonas tratadas y reducir al máximo la inflamación y  la aparición de edemas.

Una vez en casa tendrás que usar un par de veces al día una crema reductora, drenante y reafirmante que te recomendarán en la propia clínica, para lograr optimizar los resultados.