Juego de manos

¡Juego de villanas! Eso es lo que propongo hoy, con una buena noticia que me respalda. ¿Curiosa? La buena noticia es que está confirmadísimo que para llevar a un hombre al mega orgasmo sólo necesitas un par de manos hacendosas, ¿Qué me dices?

Por esto aquí tienes una guía para que tu amorcito disfrute de lo lindo y tú te luzcas como una diosa. Juego de manos

A fuego lento El primer paso es bajar un cambio, ¡Saca el pie del acelerador, mujer! Debes pensar que la excitación es un proceso que se desenvuelve de 1 a 10, en el que el parámetro más alto está representado por el orgasmo. Esto indica que no te puedes saltear los otros 9 puntos, tiempo al tiempo. Para esta etapa recomiendo todo lo que sabes hacer que lo eleve a las estrellas, pero sin estimulación sexual, sólo excitación. Esto significa tocar, chupar, en fin ¡Atormentarlo!

Como Dios lo trajo al Mundo. ¡Sí, desnúdalo! Sin razón alguna, ellos creen que tienen sexo sólo con su miembro, y es por ello que el resto de su cuerpo permanece cubierto. El hecho de que permanezca desnudo lo desbloqueará, se hará más receptivo al placer, y se encontrará liberado, vulnerable y dispuesto a disfrutar. Así que, ¡A quitarle hasta los soquetes!

Relájate y Goza Este será ti pedido hacia él, aunque sea difícil, ya que él seguramente querrá participar del acto, no es imposible. Simplemente debe entregarse a todo lo que quieras hacerle, algo que todo hombre anhela secretamente. El único requisito es que: tú toques por placer (propio), y que a él le genere placer que lo toques. En fin, no te fijes (tanto) lo que él siente que al verte gozar a ti también lo hará él, y a todo vapor. Clarísimo ¿No?

Prisionero Conviértelo en tu prisionero, cúmplele la fantasía de atarlo a la cama, a una silla, o a dónde te plazca; y sé tú quien este a cargo de la situación. En esta oportunidad, él permanecerá pasivo, mientras que tú diriges la acción. Al igual que al desnudarlo, este hecho lo coloca en un lugar más vulnerable, abierto a nuevas experiencias para acceder a una forma de placer más alocadora. Será dueño de sensaciones gloriosas de ser tocado, deseado, acosado. ¿Consejito? No es necesario comprar un par de esposas (aunque no estaría mal) puedes atarlo con tu corpiño o una corbata de él. Manos a la Obra

Por fin aparecen tus manitos en acción. Masajea a tu amorcito de pies a cabeza, los hombres tienen una hormona, llamada Vasopresina, la cual se “activa” con las caricias y acalla a la testosterona cuando un varón es tocado ayudando a quedarse calmo, relajado y conectado contigo. ¿Consejito? No olvides las zonas claves como los lóbulos de las orejas, las tetillas y los párpados.

Dueña de su pelvis Conviértete en la dueña de su zona sur, hace de ésta una escala en sí misma y abrí su pelvis. ¿Pasos a seguir? Comienza con un Effleurage (roce) realizando movimientos amplios de caricia, deslizando tus palmas a lo ancho de su piel y luego, aplicando el peso de tu cuerpo al ejercer presión. Siguiente paso: Pretisagge (amasamiento) consiste en presionar con los nudillos, rotar hacia afuera y ejerce presión con las palmas. Y por último Fricción, en el que debes usar tus pulgares, yemas y nudillos para aplicar presión en donde haya tensión muscular, y finalmente relaja. No te asustes si te quiere correr o algo por el estilo, ya que este masaje lo dejará a punto caramelo. ¡A transpirar se ha dicho!

Así como lo lees, es la etapa final, el sexo estimula la producción de hormonas esteroides que contribuyen tanto al deseo como la excitación. Debes esforzarte por construir su excitación, sin dejar que la erección te distraiga, logrando una conexión entre ambos que logre excitar a tu amorcito como nunca, y disfrutar como nunca. ¡A poner en práctica toda la guía!