Las margaritas, unas flores sencillas y de gran belleza

Continuando con el tema de las plantas y de la manera como debemos cuidarlas para que estén vistosas y espléndidas, hoy hablaremos de las margaritas. Las margaritas, unas flores sencillas y de gran belleza Al igual que los geranios, de los que hablamos en un artículo anterior, es una de las flores que mas solemos usar para adornar nuestros jardines, ventanas y balcones. 

Se trata de una planta herbácea propia de los países situados en el hemisferio Norte, y, de hecho, hay una gran variedad de ellas. Se caracteriza por sus hojas alargadas y delgadas, que pueden ser de muchos colores, aunque abundan las blancas, y su botón central de color amarillo, así como por su tallo, muy delgado y alto, alcanzando incluso el metro de altura. La flor suele medir entre los 6 y los 10 centímetros.

Las margaritas florecen en primavera, manteniéndose así hasta principios del invierno, es decir, que tienen una época de floración larga. Es conveniente usar fertilizante para que la floración sea buena. Cuando termina la época de floración, es conveniente también podarlas. Además, cuando veas que la flor se ha marchitado debes cortarlas por el punto en que se junta el tallo a ella, para que rebrote nuevamente.

Se trata de una planta que necesita mucha luz del sol, por lo que deberás escoger bien el lugar en el que la ubicas. En cuanto a la tierra en que la sembremos, es preciso que sea muy rica en cuanto a materia orgánica.

El riego, en la época de verano, será cada 2 ó 3 días, siendo quincenal en invierno. Debemos vigilar no anegarlas, con el fin de que nunca se estanque agua cerca de las raíces, puesto que la planta no lo soporta. Sí soporta bien el invierno, incluso las heladas. Para que soporte más estas últimas, un truco es poner paja en la base de la planta, que protegerá las raíces de las mismas.

Si queremos plantar, podemos hacerlo por semillas o por división de la mata, durante las estaciones de primavera y otoño.

Es una planta de una gran sencillez, característica que es precisamente la que le otorga belleza. Es ideal para decorar en cualquier lugar y rincón, sobre todo teniendo en cuenta su gran surtido de colores.