Según diferentes estudios un consumo moderado de café puede ayudar a prevenir enfermedades neurodegenerativas así como reducir el riesgo de padecer Alzheimer o Parkinson además de presentar beneficios a la hora de cuidar la piel. 
Granos poderosos
El beneficio más grande los granos procedentes de esta planta es la presencia de sustancias de tipo antioxidantes que ayudan a combatir los radicales libres y a retrasar el proceso de envejecimiento de nuestras células.
Además la cafeína es un estimulante del sistema nervioso central tanto a nivel neuromuscular como psíquico, facilitando la coordinación, mejorando la motivación y el estado de ánimo. Incrementa igualmente la resistencia, la energía y la rapidez disminuyendo por tanto el cansancio.
También reduce el riesgo de desarrollar un cáncer. Cuatro tazas al día según diversas investigaciones, disminuye las probabilidades de padecer un cáncer de recto y de colon ya que inhibe la secreción de los ácidos biliares que son los precursores de dicha enfermedad.
El riesgo de sufrir Parkinson es cinco veces menor en personas que consumen habitualmente café. También mejora las alergias y el asma ya que la cafeína dilata los bronquios ayudando de este modo a combatir las crisis de asma.
Café y belleza
El café también destaca por ser un importante aliado para la salud de la piel debido a sus efectos estimulantes que ayudan a la eliminación de grasas y de toxinas y generan una piel mucho más tersa.
Gracias a los efectos desintoxicantes del café se descubrió que el efecto de la cafeína sobre las varices era muy positivo además de mejorar la circulación de las piernas. También se emplea para combatir la celulitis puesto que la cafeína facilita la “rotura” de esas celdas de grasa, reactivando la circulación e incrementando los niveles de las moléculas quemagrasas.
Algunas soluciones hechas en casa para combatir la celulitis son por ejemplo, recoger los restos que se hayan quedado de café en el filtro de la cafetera y aplicarlos sobre la zona en que se tenga celulitis con la mano efectuando movimientos ascendentes y circulares. Así se activará la circulación y se reducirá la aparición de la celulitis.
Otra solución consistirá en moler varios granos de café para verterlos en crema emulsionante y aplicar en la zona afectada con la celulitis de una manera muy generosa. Se debe emplear una esponja vegetal para conseguir que la preparación penetre perfectamente dentro de la piel y envolver luego ésta en un papel film. Trascurridos quince minutos se retira y se enjuaga bien.
Beber con moderación
Un exceso en el consumo del café puede provocar nerviosismo e insomnio y aumentar incluso el ritmo cardíaco. Su uso prolongado provoca adicción. En caso de padecer gastritis, una úlcera o de estar embarazada, se debe evitar su consumo. Igualmente un consumo muy exagerado puede reducir la fertilidad así como provocar dolores de cabeza, náuseas, tensar la musculatura y provocar trastornos del sueño.
Al aumentar la producción de ácidos en el estómago, empeorar los síntomas de las úlceras o provocar reflujos ácidos o acidez.
