Rutinas de belleza

Uno de los enemigos de la belleza es, sin duda, la prisa, y por desgracia, la rutina de cada día se encuentra llena de ella. Si quieres organizar tu rutina de belleza con unos sencillos pasos que se pueden llegar a convertir en algo cotidiano, continua leyendo.

Lavar el rostro cada noche

Seguramente tengas muy buenas intenciones a la hora de mantener tu propia rutina de belleza, pero tus responsabilidades en el hogar y en el trabajo y por supuesto tus compromisos sociales, no te permiten cumplir con estos propósitos. Sin embargo puede resultar todo mucho más sencillo de lo que imaginas y la clave está en mantener un rutina en la que debes trabajar todos los días para conseguir los resultados deseados en muy pocas semanas.

Para ello vamos a empezar con el último paso pero sin duda el más crítico. Siempre hay que dormir con la cara bien limpia. Este es el paso más importante para una buena rutina de belleza. Hay que tener en cuenta que la regeneración de las células se encuentra al máximo cuando estamos dormidas.

Si te has olvidado de hacerlo y no quieres levantarte de la cama, puedes optar por colocar en la mesilla de noche una cesta con los utensilios más importantes como los discos de algodón, la leche limpiadora, el tónico, la crema de noche, etc. De esta manera tu rostro tendrá un aspecto más descansado y saludable al día siguiente.

Por la mañana tan solo tendrás que lavarte la cara con agua fría para estimular la circulación y limpiar los residuos de los productos utilizados la noche anterior. Si quieres ahorrar incluso más tiempo, puedes usar para ello un limpiador en gel mientras te duchas.

Utilizar un buen sérum

Aunque pienses que todavía no lo necesitas, tienes que convertirlo en uno de tus indispensables. Verás el resultado al poco tiempo de haber comenzado a utilizarlo si eres constante. Y es que un sérum tiene una fórmula mucho más concentrada y de una penetración más alta.

Utilizar crema de ojos

Lo más importante es elegir el producto correcto dependiendo de la edad de cada persona. Con este producto los ojos van a recibir lo que de verdad necesitan sin hacer la piel demasiado grasa. Esta piel es extremadamente delicada por lo que hay que ser muy constantes en su cuidado.

Una crema de sistema doble para ojos puede ser usada cada día, no simplemente para dejar esta zona más hidratad y suave, sino también para difuminar imperfecciones, rellenar y perfeccionar.

Una buena crema de día

Uno de los productos que debe estar siempre entre los mejores aliados para cuidar la piel es la crema de día. El objetivo de la misma es ayudar a ésta a verse y sentirse firme y suave durante todo el día.

Lo ideal sería utilizar un productos para cada zona de la cara, pero como estamos hablando de la falta de tiempo, la verdad es que no sería muy realista por lo que lo ideal será usar una crema que lo haga todo, es decir, que difumine la apariencia de poros y arrugas, que iguale el tono de la piel, que provea de la protección solar necesaria y que de paso, de un color natural de maquillaje. En el mercado en la actualidad existen cremas que consiguen todo esto, ¡pruébalas!

Un maquillaje que dure todo el día

Llegar al final de cada día con el maquillaje intacto puede convertirse en una verdadera lucha, por eso debes centrarte en perfeccionar y a partir de ese momento añadir los detalles al maquillaje que estés utilizando.

Si has usado una crema con un ligero toque de maquillaje, lo bueno será utilizar tonos neutros que resulten fáciles de retocar. Termina con un lápiz de labio rojo que te dará este toque de elegancia extra para terminar el día de la mejor manera posible.