Técnicas de meditación contra el dolor

Las personas que sufren dolor crónico pueden ser capaces de encontrar alivio a través de la práctica regular de la meditación. Muchos profesionales coinciden en que, mientras que la meditación no puede borrar el dolor, puede aliviarlo o te guiará a través de las formas de manejarla. Al igual que muchas terapias alternativas, la meditación requiere práctica constante para tener resultados medibles. Técnicas de meditación contra el dolor

Escanea tu cuerpo

Usa la técnica de exploración del cuerpo para ayudar a controlar el dolor. Quítate los zapatos, acuéstate sobre una superficie cómoda, siéntete qué partes de su cuerpo tocan la superficie de debajo de ti y relájalos. Inhala y tensa los músculos de la cara y la mandíbula. Exhala y libera la tensión. Haz el mismo ejercicio de cualquier otra parte en la que haya tensión en el cuerpo, por lo general los hombros, cuello, glúteos, manos o piernas. Fija una meta para dejar de lado las preocupaciones y concéntrate en el momento presente. Estar abierto a lo que puedes encontrar en tu cuerpo durante esta exploración. Visita tu dedo del pie a la cabeza, visualizando o ligeramente moviendo cada parte. Una vez que llegues a tu cabeza, imagina la interconexión de tu cuerpo. Sienta la piel que envuelve tu cuerpo y celebra su totalidad.

Imágenes guiadas

Una técnica común en la hipnosis es la imaginación guiada; puede ayudar a relajar todo el cuerpo y liberar el dolor. Comienza en una posición cómoda sin zapatos, respira profundamente cómodamente desde el diafragma, cierra los ojos, inhala y exhala la paz sin preocupaciones. Visualízate a ti misma en un ambiente tranquilo. Puedes ser suspendido en medio de las nubes, balanceándose en una hamaca o flotando en el océano. Interactúa con tus sentidos en este entorno. Agrega detalles a la visión interior hasta que te sientas plenamente realizada. Relájate respirando. Para viaje de regreso, contar hacia atrás a partir del 20.

Mantra Meditación

Uno de los rituales clásicos de la meditación, también es útil para el tratamiento del dolor. Para adaptar esta técnica, crea un mantra o un canto que sea significativo para ti y que tenga una connotación de sentirse saludable y libre de dolor. Siéntate derecho o ligeramente reclinado, en una posición cómoda. Cierra los ojos y entona, imagina o tararea tu mantra. Repite el mantra en sincronía con la respiración. Como otros pensamientos y sensaciones entran en tu mente, deja que se desvanecen, centrándote en tu mantra. Continúa esto durante 15 o 20 minutos, permitiendo que todo tu ser esté comprometido con el mantra y su poder curativo.

Enfoque relajado

Comienza sentada cómodamente en una silla en posición vertical. Cierra los ojos. Descansa tus manos en tu regazo. Inhala profundamente dentro de su abdomen, dejando que se expanda durante una cuenta de tres y luego exhala, liberará la tensión en todo tu cuerpo. Repite este proceso tres veces. Continúa esta respiración con el estómago mientras que el flujo de la relajación recorre tu cuerpo. Recuerda que debes dejar que el flujo de energía recorra desde tus extremidades hasta la cara. Visualiza cualquier lugar donde haya opresión, resistencia o dolor, la respiración enviará energía, permitiendo alejar el flujo de la tensión lejos en la exhalación. Centra tu atención en una parte específica del cuerpo y siente el aire en torno a esta parte. Si tu atención se desvía, trae a tu centro de atención la respiración. Prueba esta técnica durante 10 minutos dos veces al día.