Un restaurante de gran belleza: el Submarino L’Oceanográfic

Para aquéllos que, a la hora de buscar un restaurante en el que comer o cenar, buscan encontrar, como es lógico, una buena cocina y un buen servicio, pero también que tenga algo diferente, un toque que haga al elegido distinto a los demás, e incluso donde podamos invitar a alguien y conseguir sorprenderlo, encontrarán un establecimiento con estos requisitos en la ciudad de Valencia. Un restaurante de gran belleza: el Submarino L El local en cuestión es el “Restaurante Submarino L’Oceanográfic”, que se halla dentro del Parque Oceanográfico de Valencia.

Al entrar en el establecimiento, nos daremos cuenta enseguida de que se han puesto, en la decoración del mismo, los cinco sentidos, consiguiendo que todos sus elementos, hasta el más pequeño detalle,  formen un armonioso conjunto, que lo convierten en un restaurante de una gran belleza.

Sus paredes son en realidad un acuario, por donde nadan miles de peces plateados que forman un hermoso y atractivo contraste con el azul de su agua. Viendo sus rápidos y zigzagueantes movimientos y su ir y venir, podremos comer o cenar relajadamente en alguna de las mesas de este comedor fuera de serie, en el que nos parece formar parte de este bonito y gran acuario.

El restaurante ofrece una cocina tradicional de la comunidad valenciana, aunque con algunos toques vanguardistas y de cocina de autor. Ofrece un menú diario, uno al mediodía y otro por la noche, pudiéndose comer también a la carta.

Entre sus elaboraciones encontraremos platos como el salmonete con escama de patata o el jarrete de ternera, estando especializados también, y como no podía ser menos, en arroces, de los que ofrecen un variado surtido. También destacan sus postres, la mayoría de ellos elaborados de manera artesana, como las peras al praliné de avellanas con helado de caramelo.

Su carta de vinos es muy correcta, conteniendo un gran número de denominaciones de origen pertenecientes a todas las comunidades del país.

El restaurante no descansa durante la semana, abriendo sus puertas cada día. El único día que cierra es el 24 de diciembre