Filetes de trucha al vino blanco

La trucha es un pescado muy sano, que sólo aporta a nuestro organismo 3 grs. de grasa por cada 100 de carne, aportando además un alto contenido de potasio y fósforo. En nuestro país es un producto muy consumido, formando parte de los recetarios tradicionales de varias zonas de nuestra geografía, como la trucha navarra, la trucha a la sidra asturiana o la trucha a la aragonesa. Filetes de trucha al vino blanco Ingredientes para 4 personas: 4 truchas, ¼ de kilo de patatas pequeñas, ¼ de kilo de cebollitas francesas, 1 vaso de vino blanco, 1 dl. de nata, harina, aceite de oliva y sal.

Pon al fuego un recipiente con agua y sal. Cuando hierva el agua, echa las patatas peladas. A media cocción añade las cebollitas y deja cocer hasta que esté todo tierno.

Mientras tanto, si no nos lo han hecho ya en la pescadería, preparamos las truchas quitándoles la cabeza y la cola, abriéndolas por la mitad para que salgan dos filetes de cada una.

Echa sal en los filetes y enharínalos. Fríelos en una sartén con aceite de oliva y seguidamente incorpora el vino, dejando que se evapore el alcohol.

Añade la nata y, cuando veas que se ha reducido, añade las patatas y cebollitas y sírvelo bien caliente.