Con unos sencillos trucos conseguirás una mirada mucho más potente y más limpia que se convertirá en el foco de atracción. Toma nota.
Crear un marco adecuado
Hacer unos ojos más atractivos y grandes se puede conseguir si se utilizan algunos recursos, entre ellos por supuesto, el maquillaje. Para comenzar es imprescindible que conozcas tu rostro y que sepas con que cuentas para conseguir el lienzo adecuado. De nada te va a servir maquillarte los ojos si los tienes inflamados o si tienes ojeras. Antes de aplicar el color, fíjate bien en tu cara y corrige las imperfecciones.
Cejas definidas y espesas
Las cejas van a proporcionar carácter a tu rostro y van a determinar con se van a ver los ojos, puesto que los enmarcan. Para que parezcan más grandes, tendrás que llevar las cejas perfectamente depiladas por la zona de abajo, sin ningún pelo que pueda empequeñecer los párpados y con un aspecto definido y poblado. Para conseguirlo, rellena la ceja con un lápiz especial para ellas o con una sombra de ojos del mismo tono.
Fuera ojeras
Antes de maquillarte, aplica un poco de antibolsas y antiojeras para deshinchar la zona y deja que actúe durante unos minutos. Unifica tu rostro con un fondo de maquillaje y si lo necesitas, borra con un corrector las ojeras.
Alarga y curva las pestañas
Las pestañas largas hacen los ojos más grandes por eso muchas mujeres suelen recurrir a las pestañas postizas, pero además de poder utilizarlas, se pueden alargar y rizar con maquillaje y utilizando los instrumentos adecuados, especialmente un rizados de pestañas. Para ello primeros deberás utilizar el rizador de pestañas y después la máscara desde la raíz hasta las puntas. Haz dos o tres pasadas esperando entre ellas unos segundos para que se seque y quede mucho mejor.
Cuando la máscara de pestañas se haya secado, rellena con puntitos los espacios que quedan entre ellas con ayuda de un eyeliner líquido y de esta manera parecerán más espesas y tendrás una imagen mucho más joven.
Colores claros
No te maquilles la línea del párpado inferior con raya negra ya que aunque da misterio e intensifica la mirada, hace más pequeños los ojos. En su lugar utiliza un lápiz de ojos que sea claro, como por ejemplo un tono nácar o dorado suave y notarás como el ojo se ve más grande. El lápiz blanco también puede servir, aunque es mejor que se reserve para las más jóvenes.
Intenta trabajar con dos sombres: una en un tono clara y otra un poco más oscura. La más clara tienes que aplicarla por todo el párpado, mientras que la más oscura resérvala para el extremo final del ojo para crear un dibujo almendrado. Difumina bien las sombras para que no se noten los cortes de color.
Un toque de iluminador en el lagrimal ampliará mucho más la mirada. Es el truco empleado por las japonesas y las coreanas para hacer sus ojos más grandes.