Objetivo Blonda

Dicen que las rubias se divierten más. Será por eso que tanto las mismas rubias como las castañas y morochas gastan fortunas y fortunas en convertir su cabellera en una cada vez más blonda?
Pero el hecho es que, lograr una cabellera rubia y encontrar el tinte ideal, no es tarea fácil.
En esta nota, te daremos las técnicas ideales para aclarar cada tipo de cabello, sin perder la naturalidad de tu melena. Objetivo Blonda

Muchas veces el color natural del cabello no es del todo compatible con las coloraciones, y los resultados pueden ser catastróficos, pues difícilmente una morocha pueda quedar platinada y lograr al mismo tiempo un efecto natural. Si tu objetivo es alcanzar una melena dorada pero no sabes cual es el mejor camino, no te desanimes, pues hoy en día los salones cuentan con técnicas súper avanzadas que te permitirán aclarar tu pelo sin daños ni errores.

Si eres rubia: En este caso tienes la suerte de contar con una base natural, por eso, para ti, aclarar u oscurecer el tono de tu cabello resultará mucho más fácil. En este caso, una técnica natural son las tinturas “tono sobre tono” ayudan a renovar el brillo de tu pelo sin cambiar demasiado el color. Se colocan de la misma manera que las tinturas comunes, pero su duración es limitada, pues aproximadamente a los 15 lavados, el efecto desaparece. Otra opción son las tinturas semi-permanentes, que se aplican sobre todo el cabello y se enjuagan a los pocos minutos. Pero al igual que las primeras, después de determinado tiempo, se van y el cabello vuelve a su color original.

Cuidados en casa: Lo ideal es retocar el color una vez al mes. En tu casa, puedes lavar con un champú específico para cabellos claros (para ayudar al cabello a mantener el color) y colocar una ampolla hidratante una vez a la semana.

Si eres castaña: En este caso, lo ideal es dar luz natural sin perder el color de base. Pero si tu objetivo es llegar a ser rubia, no es recomendable aclarar todo el cabello de una sola vez. En este caso, los típicos reflejos que se realizan en la peluquería con gorra de latex son una buena opción. Eso sí, no es aconsejable acalarar el pelo más de dos tonos. Otra forma, menos dolorosa pero igual de efectiva, son las mechas con papel aluminio. En este caso, se divide la cabeza en zonas, mecha por mecha, se coloca el producto decolorante, se envuelve con papel aluminio y se deja actuar. Este tipo de mechas también se puede realizar con la ayuda de un peine. El resultado es una iluminación más sutil y natural. Para todas estas opciones, si tu objetivo es quedar lo más rubia posible, lo ideal es hacerlo poco a poco, y con esto nos referimos a que, tanto en reflejos como mechas, como hay que retocarlos mensualmente, a lo largo del tiempo, se terminará por aclarar toda la cabeza, ya que es imposible que a cada retoque los mechones queden en el mismo lugar que los anteriores, y por eso, terminarás por aclarar toda tu cabellera pero con un efecto “más natural”, ya que el cambio se habrá hecho paulatinamente. Otra opción, es variar los tonos en cada retoque, para lograr un efecto “marmolado” que hará que tu cabello tenga un mix de colores que resultará sumamente natural si los tonos corresponden a la misma gama de color pero con distintos valores.

Cuidados: Cuando las raíces molesten, deberás volver a la peluquería para retocar la iluminación.

Si eres morocha: En este caso podrás recurrir solo a un rubio cobrizo, iluminar ciertas mechas o dar luz con un desgaste de puntas. Lo ideal, antes de teñirte, será pasar por el proceso de la decoloración que “barre” tu color natural. Luego, se coloca tintura por diversos sectores. Este tipo de coloración afecta los pigmentos naturales del pelo, y por eso, éste puede quedar un poco poroso, problema que se resuelve con un baño de crema, aplicado una vez por semana. Otras opciones más naturales son las iluminaciones y el desgaste de puntas. Este último, no altera íntegramente el color natural del cabello. La idea consiste en aclarar dos tonos las zonas inferiores de tu melena para crear un suave efecto de iluminación. En estos casos, es ideal renovar el color aproximadamanete cada 25 días.

Tips generales:

  • En todos los casos, para lograr un efecto natural, es ideal consultar con peluqueros expertos, que serán los que mejor podrán determinar el color que vayan a aplicarte.
  • Si tu idea es teñirte en casa, lo ideal es guardar el nombre (marca) y número de la tintura que utilices, para que, a la próxima aplicación, puedas adquirir la misma en caso de haber quedado satisfecha con el color, o variarla según si tu objetivo es aclarar u oscurecer más. No olvides que, a igual número de color en la tintura, en cada marca el color resulta distinto.
  • Hay que tener en cuenta que, al momento de comenzar a teñir el cabello, se entra en una especie de «círculo vicioso» ya que, si se opta por un color, hay que mantenerlo a lo largo del tiempo, pues mínimamente habrá que retocar una vez al mes para evitar que sean evidentes las raíces, que quedan muy poco estéticas. Y si nos arrepentimos y queremos volver a nuestro color natural, tomará al menos 2 o 3 meses, ya que no bastará con una sola aplicación del color debido a que al mes, se aclarará nuevamente, revelando los colores anteriores.
  • Hay que tener mucho cuidado a la hora de decidirnos por rubios cobrizos o ceniza, pues éstos primeros, si bien tienen un brillo más impactante, en cabellos de bases oscuras, suelen decolorarse hacia el naranja, mientras que, los ceniza logran dar un color más natural, aunque menos brilloso.
  • Todos los cabellos, y más aun los teñidos, necesitan de cuidados frecuentes para mantenerse sanos y brillosos. Como regla general, se recomienda utilizar champú y acondicionador específicos para cada cabello, hacerles baños de crema e hidratación al menos una vez por semana, y recortar las puntas una vez cada dos meses para evitar que se florezcan y para fortalecer la fibra capilar.