El origen de la mousse, como podemos deducir por su nombre, es francés. Su base es la clara de huevo, que se tiene que montar a punto de nieve, y es lo que le otorga esta esponjosidad que la caracteriza. Ingredientes para 4 personas: 4 claras de huevos, 1 litro de nata para montar, 150 ml. de leche de coco, 150 ml. de crema de coco, 1 sobre de gelatina sin sabor, coco rallado.
Pon al fuego un cazo con la leche de coco y con la crema de coco. Caliéntalas sin dejar que llegue a hervir.
Disuelve en la mezcla de leches la gelatina y deja que se enfríe.
Bate las claras de huevo hasta que te queden a punto de nieve.
Monta la nata. Una vez montada, le añades la mezcla que has hecho con la leche y la crema de coco y mezcla todo bien .
Finalmente, añade a la mezcla las claras montadas y remueve con un movimiento en círculo.
Echa la mousse en copas y déjalas enfriar en el frigorífico.
Sírvela fría, con el coco rallado por encima. Si quieres puedes también rallar un poco de chocolate por encima de la copa.