Resuelve menús con lo que te sobre de otros platos

En estas fiestas navideñas es muy normal que nos sobren restos de comidas que podrán solucionarnos algunos menús. Descubre algunas ideas que te permitirán aprovechar lo que te ha sobrado tan sólo con añadir algunos ingredientes que seguro tienes en tu nevera o en tu despensa. Resuelve menús con lo que te sobre de otros platos

Ensaladilla de Navidad

Aprovecha los restos de pollo asado o de pavo típicos de estas fiestas y elabora una rica ensaladilla con los siguientes ingredientes:

· Tres patatas

· Dos zanahorias

· 200 gramos de guisantes

· 200 gramos de maíz dulce

· 100 gramos de queso semicurado

· Tres cucharas de mayonesa

· Dos cucharas de vinagre

· Una pizca de nuez moscada

· Pimienta molida y sal

· Restos de pollo o de pavo asado

Comienza cociendo las patatas y las zanahorias para después pelarlas y cortarlas en dados. Enjuaga el maíz y los guisantes para eliminar todo el líquido de su conservación e incorpóralos a la mezcla de las zanahorias y de las patatas. Trocea los restos de pavo o de pollo y corta en dados pequeños el queso. Agrégalos y remueve todo bien.

En un cuenco mezcla el vinagre, la mahonesa, la pimienta y la nuez moscada y sazona si es necesario. Remueve todo bien. Aliña con esta salsa la ensalada y repártela en cuencos para servir a una temperatura ambiente.

Si te han sobrado también gambas, puedes trocearlas y utilizarlas en vez de la carne de pavo o de pollo.

En cualquier caso tan sólo te llevará prepararlo 10 minutos por lo que resulta perfecto cuando no cuentas con demasiado tiempo para cocinar.

Pastel de puerro, de calabacín y de ahumados

En este caso utiliza:

· Los restos de ahumados de bacalao, salmón o trucha que te hayan sobrado

· Una lámina de masa quebrada

· Medio calabacín

· Un puerro

· Dos dl. de leche evaporada

· Cuatro huevos

· Perejil

· Aceite, sal y pimienta

Extiende la masa quebrada y córtala en los discos necesarios según las personas que vayan a degustar este plato, para forrar con ellos los moldes de tartaleta que necesites, previamente engrasada con un poco de aceite. Cubre con papel sulfurizado y añade unos pocos de garbanzos secos. Mete las tartaletas en el horno que previamente habrás calentado a unos 180 grados y cuece durante unos ocho minutos.

Para hacer el relleno limpia, lava y pica el puerro. Sofríelo con aceite hasta que quede transparente. Lava igualmente el calabacín y córtalo en rodajas. Añádelo al sofrito y continúa cociendo durante otros cinco minutos más. Salpimenta todo y retira del fuego para agregar los ahumados en trozos junto con el perejil lavado y bien picado.

Bate después los huevos junto con la sal, la pimienta y la leche y añade a la mezcla anterior. Rellena con todo ello las tartaletas y hornea durante unos 25 minutos. Cuando estén templadas sírvelas y verás que ricas están.

Este plato con el que puedes sorprender hasta seis personas y de elaboración muy sencilla, tan sólo te ocupará unos quince minutos de tu tiempo y seguro que sorprenderá a todos tus invitados.