Reducir esta zona no es algo sencillo ya que puede resultar una parte del cuerpo muy rebelde para un gran número de personas. En cualquier caso sí que se puede reducir la hinchazón que provoca un mayor volumen, si cambiamos ciertos hábitos.
La cantidad de comida
Las cantidades que se ingieren son lo más importante y ello va a depender de cada persona. Hay que evitar llenarse al máximo y aprender cuando se debe parar de comer, es decir, el momento en que se deja de tener hambre y que suele ser más o menos cuando estamos al 80%.
Por otra lado esta última parte suele ser la más peligrosa ya que se suele optar por tomar algo dulce que es lo que más ensancha la cintura y más engorda. Además hay que masticar muy bien cada bocado, hasta que esté prácticamente líquido, ya que en numerosas ocasiones una persona se hincha después de las comidas por este motivo.
Cenar temprano
La hora de la cena tiene que ser lo más temprano posible y si después se tiene hambre se debe optar por una infusión, un vaso de leche preferiblemente vegetal, un puñado de frutos secos o un kiwi, por ejemplo. Esto es fundamental y con este hábito tan sencillo se notará una enorme mejoría.
Si se tienen trastornos digestivos habrá que acudir al doctor para que descarte cualquier posible alergia, trastornos nerviosos o intolerencias alimentarias que puedan estar causando una inflamación del intestino crónica.
El desayuno
Durante tres días es desayuno tiene que ser una propuesta nutritiva, saludable y rica en alimentos con fibra, crudos, proteínas vegetales y grasas buenas. Con esta combinación la sensación de saciedad y vitalidad se hará patente y además se contribuye a reducir la cintura.
Para preparar un desayuno depurativo se necesitará un kiwi, una rodaja de piña fresca o dos ciruelas maduras, medio aguacate, una rama de apio fresco, una cuchara de semillas de chía que previamente habrán estado en remojo toda la noche, quince avellanas o almendras tostadas o crudas, una pizca de jengibre en polvo, una cuchara de aceite de coco virgen extra, una cuchara de maca en polvo y un poco de estivia.
Se meten todos estos ingredientes en una licuadora y se añade una bebida vegetal o un poco de agua para facilitar el licuado. El batido resultante se puede ir tomando a lo largo de toda la mañana.
La comida y la cena
Estas dos comidas deben estar basadas en dos raciones. Una de ellas tiene que ser una ración de vegetal cocinado o crudo, como una ensalada, un gazpacho, una crema de verduras, etc., y una ración de proteína consistente en carnes, huevos, pescado, legumbres, queso fresco, frutos secos o queso fresco.
Los carbohidratos deben consumirse en cantidades pequeñas, preferiblemente al mediodía y que sean preferiblemente integrales. Durante tres días se deben evitar los postres y entre horas se pueden consumir unos zumos caseros de verduras, un plátano, unos frutos secos o un poco de leche vegetal.